Los empresarios gallegos no están contentos con el Gobierno de coalición entre PSOE y Sumar en Moncloa, que debido a su frágil mayoría parlamentaria debe buscar apoyos en una amalgama de partidos como Junts, PNV, ERC, BNG, EH Bildu o Podemos, que con intereses muy diferentes e incluso —como se ve en materia impositiva—, contrapuestos.
Al menos, esto es lo que se deduce de las críticas lanzadas por el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), Juan Manuel Vieites, que durante un desayuno informativo ayer en Santiago afirmó que ve «instalado en España cierto chavismo, entre comillas».
Por esto mismo, el líder de la patronal cargó contra las políticas impulsadas por el Ejecutivo central por una reforma fiscal que «enfurece a sus socios» y «a sectores clave», al tiempo que ha pedido un «compromiso» al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo —presente en el acto—, para que «cuando llegue» a La Moncloa emprenda políticas para «fortalecer» al sector privado.
Durante el almuerzo, celebrado en el Hostal dos Reis Católicos y en el que también participó el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, el presidente del Parlamento, Miguel Santalices, y el consejero delegado de Abanca, Francisco Botas, entre otros, Vieites abogó por el impulso de la colaboración público-privada y el papel de los empresarios para «aportar soluciones». Así, reclamó «compromisos sólidos» a todas las autoridades, especialmente al líder de la oposición para que si llega a gobernar apueste por «dar fuerza a las empresas».
En sentido contrario, Vieites aplaudió las políticas económicas y fiscales de la Xunta, un «gobierno estable» que favorece que la economía autonómica vaya «bien» y pueda «mejorar». En este contexto, el jefe de la patronal gallega se dirigió a Feijóo para pedirle que si logra su objetivo de llegar a la Moncloa exporte el modelo gallego de «sostenibilidad fiscal y previsibilidad» al conjunto del Estado.
Eólico e infraestructuras
En el plano gallego, reflexionó sobre la paralización judicial de decenas de parques eólicos para lamentar la «desconfianza» que provoca en la industria. Asimismo destacó la «riqueza de recursos naturales» que tiene Galicia, defendiendo una explotación «garantista en el territorio» y «que evite la judicialización sistemática» de los proyectos.
En materia de infraestructuras, el presidente de la patronal se dirigió al ministro de Transportes, Óscar Puente, para pedirle que «planifique» la salida sur ferroviaria de Vigo para poder conectar la alta velocidad con Oporto para 2032. También criticó que el Congreso paralizase «por duodécima vez» la ley de transferencia de la AP-9 a la Xunta y, en paralelo, pidió la eliminación de los peajes, igual que el Gobierno central va a estudiar hacerlo en autopistas estatales en Madrid, Ávila o Segovia.
Pide posponer la reforma
Por su parte, Alberto Núñez Feijóo, aseveró que el PSOE y sus socios «mal avenidos» están en una «competición bochornosa» para diseñar un «hachazo fiscal» . Tras acusar al Ejecutivo que preside Pedro Sánchez de «luchar con uñas y dientes para asfixiar todavía más la economía de los trabajadores y de las familias», recalcó que «por pudor, al menos durante algún tiempo, debería posponer» una reforma fiscal en la se pretenden imponer subidas a varios gravámenes, como a la banca, al tabaco o al diésel, entre otros.
«Necesitamos una reforma fiscal que alivie a las familias y que relance la competitividad de la economía», declaró, un día después de que el Grupo Socialista desconvocase por segunda vez esta semana la Comisión de Hacienda del Congreso que tiene que debatir el proyecto para crear un nuevo impuesto mínimo global del 15% para las empresas multinacionales, ante la falta de acuerdo con sus socios, enfrentados entre sí en varios puntos.
Feijóo, quien destacó que el PP en Galicia lleva «una década sin subir los impuestos y bajándolos siempre que puede», criticó que Moncloa esté «buscando fórmulas para que los ciudadanos acaben pagando siempre más impuestos».