En junio de 2024, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció que el país enviaría aviones Mirage 2000-5 a Ucrania, con la promesa de que llegarían antes de finalizar el año. Recientemente, se han dado a conocer más detalles sobre el envío de estos aviones, incluyendo el número que se entregará y el cronograma de su llegada. De acuerdo con nuevos informes, seis de estos aviones de combate se transferirán a Ucrania en la primera mitad de 2025.
Según las últimas informaciones, Ucrania recibirá seis aviones de combate Mirage 2000-5F, junto con un paquete completo de apoyo. Estos aviones llegarán tras la finalización del entrenamiento de los pilotos y el personal de mantenimiento ucranianos. Este envío se realizará durante el primer trimestre de 2025, cuando los equipos ucranianos estén listos para operar los aviones. Se incluye un paquete integral de soporte, lo que implica que los aviones estarán completamente operativos para su uso inmediato.
En total, Francia tiene previsto suministrar hasta 15 aviones Mirage 2000-5 a Ucrania. Sin embargo, una fuente de la prensa francesa, Legendaires, ha indicado que podrían ser hasta 20 los aviones enviados en el futuro cercano. Estos aviones serán configurados para misiones de ataque terrestre y estarán equipados con municiones aire-tierra, así como con sistemas avanzados de guerra electrónica.
Por otro lado, la Fuerza Aérea francesa continúa modernizando su flota con el caza Dassault Rafale, que recientemente ha tenido un notable éxito en el mercado de exportación. Al 31 de diciembre de 2023, aún permanecían en servicio 28 aviones Mirage 2000-5F dentro de las Fuerzas Armadas de Francia, lo que muestra que estos aviones continúan siendo una parte esencial de su infraestructura de defensa.
El estado actual de la Fuerza Aérea de Ucrania y otras donaciones internacionales
En cuanto a la situación de la Fuerza Aérea de Ucrania, esta sigue en una condición limitada. La escasez de aviones operativos se ve agravada por la falta de pilotos, que se encuentran fuera del país recibiendo formación en nuevas plataformas de aviones de combate. Esto ha dejado a la fuerza aérea ucraniana sin una presencia significativa en el aire, mientras sus pilotos reciben el adiestramiento necesario para utilizar los aviones que aún posee.
La Fuerza Aérea ucraniana ha sufrido numerosas bajas desde el inicio de la guerra. No obstante, ha recibido algunos aviones MiG-29 de reemplazo de países como Polonia y Eslovaquia, además de haber reactivado algunos aviones que ya estaban fuera de servicio. Aunque el número exacto de aviones operativos no está claro, se sabe que la mayoría de estos aviones se encuentran operando en funciones de defensa aérea, lejos de las líneas del frente.
En cuanto a los F-16, los primeros aviones de este modelo ya han sido entregados a Ucrania, aunque uno de ellos se ha perdido en combate. Su número sigue siendo limitado, y se espera que Ucrania maneje estos aviones con cautela a medida que los integra en sus operaciones de la Fuerza Aérea y en sus planes de batalla. Estos aviones representan un avance significativo, pero aún son insuficientes para cubrir las necesidades de Ucrania en la guerra.
Además de estos envíos, Suecia está considerando la donación de entre 15 y 30 aviones Gripen C/D de Saab. Se sabe que los pilotos ucranianos ya han recibido formación con estos aviones, y los Gripen han sido incluidos en un reciente paquete de ayuda sueco a Ucrania. Este paquete de ayuda incluye fondos para la compra de piezas de repuesto, en lugar de desmantelar los Gripen antiguos para obtener componentes.
El desempeño de la Fuerza Aérea Rusa en la guerra
En otro frente, la Fuerza Aérea rusa ha sido uno de los aspectos más sorprendentes de la invasión de Ucrania. A pesar de contar con un gran número de aviones y una capacidad teóricamente moderna, la Fuerza Aérea rusa no ha logrado desmantelar eficazmente la defensa aérea ucraniana, un objetivo que la Fuerza Aérea israelí afirma haber alcanzado con éxito contra Irán en una sola noche sin pérdidas aéreas. Como resultado, la aviación rusa no ha podido conseguir la superioridad aérea en la zona y se ha visto obligada a operar mayormente en un papel de apoyo a las tropas terrestres.
Este desafío ha sido un factor clave en el desarrollo de la guerra, ya que la falta de control aéreo ha limitado las capacidades ofensivas de las fuerzas rusas y ha permitido a Ucrania mantener su capacidad de defensa aérea, a pesar de las dificultades que enfrenta en otros aspectos de la guerra.