Compromís pone en aprietos al PSOE por su papel en la gestión de la DANA que ha dejado al menos 214 víctimas en la Comunidad Valenciana. La petición de una comisión de investigación que esclarezca en el Congreso por la tragedia ha dejado al socio mayoritario del Gobierno en una situación «incómoda«, según creen en el partido valencianista, que dan por hecho que los socialistas se verán «obligados» a apoyar este órgano, al que llamarán a comparecer no solo a miembros del Govern valenciano de Carlos Mazón sino también a ministros del Gobierno central que tuvieran competencias en materia de coordinación de emergencias.
La portavoz de Compromís, Águeda Micó, anunciaba este martes su intención de solicitar formalmente la creación de una comisión destinada a depurar responsabilidades en el ejecutivo valenciano, pero también en esclarecer cuáles son las competencias estatales en una crisis de este tipo, con el objetivo de observar deficiencias y permitir una legislación que facilite la gestión en catástrofes de este tipo. Lo llamativo del anuncio es que entre la lista de comparecientes, la diputada de Sumar, socio minoritario del Gobierno, también se contemplaba llamar a miembros del Consejo de Ministros que comparten.
Más tarde fue Podemos quien, dentro de su estrategia de desgaste al Ejecutivo, anunció que también pediría una comisión sobre este asunto, aunque endureciendo el discurso contra Pedro Sánchez, a quien responsabiliza de «no haber declarado el estado de alarma» para asumir las competencias del Govern valenciano, y avanzaba que contaba con el visto bueno de Bildu y ERC para registrarlo. Tanto los morados como el partido valencianista se han abierto a acordar una única solicitud que deberá primero registrarse en el Congreso y después votarse en el Pleno. Y es ahí donde Compromís se muestra convencido de la posición que tendrán que asumir los socialistas.
El PSOE acogió con frialdad el anuncio de Sumar. Su portavoz, Patxi López, argumentaba en el pasillo del Congreso que «no es el momento» de este tipo de peticiones, mientras el ministro de Transportes, Óscar Puente, se expresaba en la misma línea, aunque admitiendo con cierta resignación que «no es descartable» la creación de este órgano, aunque sin avanzar su postura.
«El PSOE no podrá oponerse»
En Compromís se muestran convencidos de que, aunque no llegue a firmar la solicitud de creación, «el PSOE no podrá oponerse» con sus votos en Pleno a la creación de una comisión de investigación. Una comisión que va encaminada, sobre todo, a responsabilizar al Govern valenciano por la gestión de la DANA, aunque también obligue a acudir a ministros socialistas.
El convencimiento en el partido valencianista de que la comisión saldrá adelante con los votos del PSOE es prácticamente total, al considerar que «el electorado socialista de la Comundad Valenciana no entendería otra cosa«. Más aún después de la multitudinaria manifestación que recorrió Valencia este fin de semana, donde miles de personas se echaron a las calles para pedir la dimisión del presidente valenciano, el popular Carlos Mazón.
«¿Cómo vas a explicar que no quieras que se investigue lo que ha sucedido, con más de doscientas víctimas?», se preguntan. En caso de que los socialistas finalmente llegaran a rechazar la comisión, Compromís emergería como la principal formación valenciana dispuesta a escrutar al Govern. Un extremo que no creen que el PSOE pueda permitirse.
Tensiones entre los socios de Gobierno
La investigación parlamentaria por la DANA reaviva ciertos recelos entre los socios de Gobierno, que ya han sufrido algunas tensiones en los últimos días. Ha sido precisamente a cuenta del acuerdo que el Ministerio de Hacienda alcanzó con PNV y Junts para dejar fuera el impuesto a las energéticas. El anuncio de aquel acuerdo hace dos semanas molestó en las filas de Yolanda Díaz, donde observan como una deslealtad el hecho de que el PSOE cerrase primero un acuerdo con fuerzas conservadoras antes que con su socio de coalición, que en esos momentos se encontraba además en horas bajas por la crisis de Iñigo Errejón.
Este lunes sin embargo Sumar y PSOE trataron de cerrar la crisis con un acuerdo de reforma fiscal que, si bien no lograba recuperar el impuesto extraordinario a las energéticas, sí implementaba cesiones a Díaz como poner un IVA al 21% a los pisos turísticos, la supresión del régimen fiscal de las socmis o la subida de dos puntos en IRPF a las rentas superiores a 300.000 euros.
Sin embargo, sólo un día después de haber escenificado un cierre de filas entre los socios de Gobierno, rea Compromís quien volvió a romper filas con el beneplácito de Sumar. El partido valenciano tiene voz propia dentro del grupo parlamentario, y no es raro que dentro de la coalición actúe de manera más o menos libre. En esta ocasión, sin embargo, el anuncio recibió el visto bueno del resto de la coalición, que no puso objeciones a la petición de comisión de investigación, aunque incluyera también poner contra las cuerdas a ministros socialistas con los que comparten Gobierno.