Podemos pide al Gobierno ligar la prórroga del impuesto a las energéticas al decreto de ayudas por la DANA. El partido ha trasladado su rechazo al acuerdo que el PSOE alcanzó con PNV y Junts donde se dejaba caer este impuesto extraordinario y ha reclamado incluir esta medida en un real decreto que se apruebe en Consejo de Ministros, con el objetivo de forzar el apoyo del resto de fuerzas para impulsar el tributo.
En una reunión mantenida este martes en el Congreso entre la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la formación morada ha propuesto prorrogar durante seis meses el actual gravamen extraordinario a las energéticas, «de modo que haya más tiempo para negociar un acuerdo definitivo», según fuentes del partido, que llama a lograr el apoyo «también a los grupos de izquierdas», recordando que sus votos «valen lo mismo que los de PNV y Junts». Una prórroga que, defienden, «puede incluirse en cualquiera de los reales decretos de ayuda a las personas afectadas por la DANA«.
Este mismo martes se daba a conocer el nuevo decreto de ayudas por la DANA que aprobó este lunes el Consejo de Ministros. En el texto publicado en el BOE se incluía también un apartado que nada tenía que ver con la catástrofe natural, y que implicaba el blindaje vía decreto de un cargo de confianza del ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, evitando la jubilación forzosa del director adjunto operativo de la Policía Nacional, el comisario principal José Ángel González.
El Gobierno ha empleado este método en múltiples ocasiones -así se eliminó por ejemplo el veto del Senado al techo de gasto mediante una enmienda a la ley de paridad, o suprimió una cláusula en la ley de amnistía que Junts pedía retirar-. Podemos pide ahora volver a emplear esta fórmula para prorrogar el impuesto a las energéticas, con el objetivo de asegurar los votos necesarios para que continúe vigente seis meses más, puesto que el resto de partidos no podrán oponerse a un decreto que incluya ayudas al gobierno valenciano.
Negociación in extremis
El nerviosismo ha ido creciendo en las últimas horas en el ala socialista del Gobierno, que la semana pasada anunció un acuerdo con PNV y Junts donde se daba continuidad al impuesto a la banca, pero permitía la gestión de las comunidades autónomas, que podrán bonificarlo. Esta enmienda se incluyó la transposición de una directiva europea encaminada a aumentar al 15% el Impuesto de Sociedades a las multinacionales.
Sumar mostró su malestar por este acuerdo y amenazó con abrir un frente al Gobierno por dejar caer el impuesto a las energéticas, pero este lunes anunció finalmente un acuerdo con el PSOE para subir la 21% el IVA a los pisos turísticos y eliminar las exenciones a las SOCIMIS, además de subir dos puntos el IRPF a las rentas a partir de 300.000 euros.
Pero la falta de apoyos a la norma, y la falta de garantías de que el texto pudiera salir adelante en la votación definitiva, llevó este lunes al PSOE a posponer la Comisión de Hacienda que debía celebrarse ese mismo lunes. La reunión iba a encaminada a votar las enmiendas y a cerrar el texto definitivo, y finalmente se celebrará este jueves. El dictamen que salga de ahí deberá votarse definitivamente más adelante por los 350 diputados en Pleno.
Bildu y ERC también se han opuesto a la caída del impuesto a las energéticas, pero Podemos ha sido el más beligerante, y ha llegado a amenazar con tumbar la norma completa, pese a que su contenido -el aumento del impuesto de sociedades al 15% para multinacionales- ha sido una de las grandes reivindicaciones de la izquierda.
