La exmujer de Pau Rigo, quien también estaba en el domicilio de Porreres cuando el anciano mató a uno de los ladrones que les entró a robar, ha afirmado en el juicio con jurado en la Audiencia que ambos decidieron que él cogiera una de las escopetas que tenían cargadas en la vivienda para darle «un susto» a los asaltantes.
La Audiencia ha continuado este lunes el juicio con jurado contra Pau Rigo y los tres asaltantes con una demora de dos horas. Fredy Escobar había sido detenido por otros delitos, secuestro y lesiones, y ha sido trasladado por la mañana al juzgado de guardia. Tras decretar el juez su ingreso en prisión, fue conducido esposado al juicio con jurado.
Apolònia Mestre ha afirmado que en el momento de los hechos ya estaba divorciada de Pau Rigo, pero solía ir con frecuencia a su domicilio de Porreres en una casa rural.
«Cada mañana cuando me despierto, lo revivo como una película que me ha quedado marcada durante toda la vida», ha abundado la testigo en su comparecencia.
La exesposa de Pau Rigo ha relatado que lo primero que recuerda de la mañana del 24 de febrero de 2018 fueron los gritos de su exmarido. Este había sorprendido a dos hombres «encapuchados, de negro y con una pata de cabra cada uno». «Y Pau decía: ‘¡Han vuelto!’», recordó. La testigo ha explicado que ambos sospechaban que los asaltantes eran los mismos que habían entrado a robar unos meses antes.
A un metro y medio
Mientras Pau Rigo se encontraba con uno de los asaltantes en el sótano —donde estaba la caja fuerte— ella estaba custodiada por el otro atracador en el interior de su dormitorio. Éste le propinó un empujón pero no hubo más agresiones, según ha aseverado.
En dicha habitación, ha comentado a preguntas del fiscal, Pau Rigo tenía varias escopetas cargadas. «Eran por si venía alguien, no es que las hubiéramos puesto después del primer atraco. Podría haber sido así, pero no. Vivíamos en el campo, a él le gustaba cazar… Llevaban ahí toda la vida, eran como un seguro, digamos», ha abundado.
En un momento del asalto, ha subrayado, el ladrón que la custodiaba se fue de la habitación y entró Pau, quien cogió una de las escopetas. «Y me dijo: ‘Ya han venido dos veces, ¿qué hacemos?. Yo le dije que hiciera lo que quisiera», dijo.
Uno de los abogados defensores de los tres presuntos autores del atraco les ha repreguntado qué pretendían hacer con las escopetas cargadas. La exesposa ha reiterado que «un susto». Y ha precisado que Rigo le descerrajó el disparo a un metro y medio de distancia.
