El Col·legi de Geòlegs i Geòlogues de Catalunya (Colgeocat) ha avisado de que los caudales fluviales involucrados en las grandes lluvias e inundaciones «se ven incrementados por un urbanismo desaforado, que no deja espacio adecuado para la laminación de las avenidas, y su infiltración en el subsuelo, y por una ocupación intensiva de los espacios fluviales«.
En un comunicado, afirma que «palabras como decrecimiento y deconstrucción han de dejar de ser una utopía, para convertirse en hechos», y urge a estudios rigurosos y análisis caso a caso.
Un 15% del suelo urbano está en zona inundable
El colegio cita datos de la Generalitat de Catalunya, según los cuales, de enero a junio, se ha construido a un ritmo de 1 vivienda unifamiliar acabada cada 3 horas, y considera que no es sostenible porque la mayoría son segundas residencias.
Al menos un 15% del suelo urbano consolidado está en zona inundable y 705.000 personas viven ahí
También dice que, según la Generalitat, al menos un 15% del suelo urbano consolidado está en zona inundable y que 705.000 personas viven ahí, y constata «un riesgo geológico por inundación claramente alto».
El Col·legi avisa de que muchos municipios catalanes en zonas de riesgo (cita el Vallès y zonas del litoral) «todavía no tienen redactado el correspondiente plan de protección civil por riesgo de inundación».
Mitigación y prevención del riesgo
Respecto a la mitigación y prevención del riesgo, dice que la gestión es mejorable, porque la previsión meteorológica debe acompañarse de «oportunas y rápidas decisiones gubernamentales» , y con coordinación entre entidades de gobierno, protección civil, servicios meteorológicos, equipos de emergencia, agentes de la autoridad, Agència Catalana de l’Aigua y el centro de gestión del riesgo.
Además, pide «mejor educación ciudadana en riesgos geológicos», y asegura que los sucesivos planes de educación de la juventud han ido reduciendo cada vez más la enseñanza de la geología.
Inundaciones en Valencia
El Col·legi constata que el levante peninsular siempre tiene peligro de fuertes lluvias otoñales e inundaciones, sobre todo en el litoral, y cita como ejemplos las más de 75 inundaciones en la ciudad de Valencia desde 1321 hasta finales del siglo XIX, y las más de 400 de la Comunitat Valenciana en el mismo período.
Pero el cambio climático ha «intensificado» en los últimos años la frecuencia y magnitud de estos fenómenos: hace unas décadas se consideraban muy importantes las precipitaciones de 250 l/m2/día, y ahora empiezan a ser corrientes magnitudes de 400- 500 l/m2/día, con puntas localizadas aún más altas.