La morgue de la Ciudad de la Justicia de Valencia ha recibido desde que se produjo la DANA, hace nueve días y hasta las 20.00 horas de este jueves, un total de 207 víctimas mortales, a 200 de las cuales se les ha practicado ya la autopsia.

Asimismo, las oficinas «ante mortem» habilitadas por la Policía Nacional y la Guardia Civil en colaboración con médicos forenses contabilizan en estos momentos 78 casos activos por denuncias de desaparición en la región.

Del total de esas personas fallecidas, 167 están plenamente identificadas (140 por huellas digitales y otras 27 por ADN), mientras que 40 difuntos siguen sin identificar, según la última actualización de cifras por el Centro de Integración de Datos (CID).

Las mismas fuentes han insistido en que la cifra de desapariciones activas y el número total de víctimas mortales son parámetros diferentes que no deben ser sumados, ya que los expedientes de desaparición pueden aumentar o descender en función de las nuevas identificaciones que puedan producirse entre los fallecidos existentes, el incremento de denuncias de desaparición o la localización de personas con vida.

Los expedientes «ante mortem» de personas desaparecidas que están activos corresponden exclusivamente a denuncias donde los familiares han aportado diferentes datos y facilitado muestras biológicas junto a las denuncias en las oficinas habilitadas para ello con el fin de que permitan la identificación posterior de sus seres queridos.

En comparación con el balance de este miércoles, hay ocho nuevas víctimas mortales contabilizadas, 22 nuevas identificaciones de personas fallecidas, una autopsia más y 15 expedientes por desaparecidos activos menos.

Por otro lado, las 200 víctimas a las que se les ha practicado la autopsia han sido derivadas a la morgue de Feria Valencia, donde hasta las 20.00 horas de este jueves se ha producido la entrega efectiva de 106 restos mortales para que sus familias lleven a cabo las exequias fúnebres.

El CID es un órgano técnico que está integrado por una Oficina Forense y una Oficina de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con agentes especializados de la Guardia Civil y la Policía Nacional, y tiene como función principal reunir y supervisar los informes de identificación que realicen las distintas instituciones a las personas fallecidas en sucesos con múltiples víctimas.

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