Este sábado, Madrid se prepara para una manifestación que busca dar un contundente mensaje de rechazo contra el racismo y la xenofobia que han aflorado tras la tragedia provocada por la DANA en la Comunidad Valenciana. El fenómeno climático extremo, que ha dejado más de 200 muertos y devastación en la región, no solo ha puesto en evidencia las carencias en cuanto a planificación y prevención ante desastres naturales, sino que también ha servido como terreno fértil para que grupos de ultraderecha difundan bulos y manipulen la tragedia en beneficio de su agenda de odio.
Bajo el lema “Sin antirracismo no hay futuro. Estamos con vosotras, Valencia antirracista”, diversas colectivas, organizaciones y activistas migrantes y antirracistas han convocado a la ciudadanía para marchar por las calles de Madrid, desde Neptuno hasta Callao, en solidaridad con el pueblo valenciano. El evento se enmarca dentro del Otoño Antirracista y Anticolonial, un espacio que ha servido para visibilizar las luchas y resistencias de diversos colectivos frente al auge de la extrema derecha en España y otros países europeos.
La catástrofe de la DANA, con su saldo de pérdida humana y destrucción, ha dejado entrever la vulnerabilidad de ciertos sectores de la población, especialmente de personas migrantes y trabajadoras del campo. Estas comunidades, que viven en situaciones de precariedad en asentamientos temporales y sin acceso a servicios básicos, han sido particularmente afectadas por el desastre. Sin embargo, en lugar de recibir el apoyo necesario, han sido víctimas de una ola de discursos de odio y desinformación, orquestada por la extrema derecha para redirigir la frustración y el dolor hacia aquellos que ya se encuentran en situación de marginalidad.
Este tipo de respuesta no es casual; es parte de una estrategia recurrente de ciertos grupos políticos que aprovechan cada suceso trágico para verter odio en la sociedad, utilizando las redes sociales y otros medios de comunicación como amplificadores de mensajes xenófobos y racistas. La tragedia en la Comunidad Valenciana ha sido el escenario perfecto para que estos grupos promuevan mensajes falsos que vinculan a personas migrantes con la inseguridad o el caos. En muchos casos, estos bulos se viralizan, generando rechazo y estigmatización hacia aquellos que, lejos de ser responsables de la tragedia, son también víctimas de sus devastadoras consecuencias.
La presidenta de SOS Racismo Madrid, Sarahi Boleko, ha señalado que la marcha de este sábado busca defender la dignidad y los derechos de todas las personas, especialmente de quienes han sido vulnerabilizados por políticas y discursos de odio. “Marchamos al son del antirracismo por la defensa de nuestra dignidad y la defensa ante el ataque a nuestros derechos (laborales, vivienda, salud sexual y reproductiva, entre otros tantos). Salimos a las calles para exigir una verdadera justicia social que tiene que ser antirracista, feminista, obrera y antifascista”, ha manifestado Boleko.
Los organizadores de la manifestación también han señalado la importancia de rescatar la memoria de personas como Lucrecia Pérez, quien fue víctima de un asesinato racista en 1992 en Aravaca, Madrid. La marcha de este sábado busca recordar no solo a Pérez, sino a todas las víctimas de lo que consideran “racismo institucional”, un fenómeno que, a su juicio, se encuentra arraigado en diversas esferas de la sociedad española, desde el ámbito educativo hasta el laboral, pasando por el sanitario, político y cultural. En este sentido, la marcha es también un llamado a la acción para que el gobierno y la ciudadanía reconozcan el racismo como un problema estructural que requiere políticas y acciones urgentes.
El manifiesto de la manifestación subraya que, incluso en medio de una tragedia como la de la DANA, la extrema derecha encuentra oportunidades para generar división, promoviendo mensajes que estigmatizan a las personas migrantes y desviando la atención de los problemas estructurales que afectan a la población en general. “Ante esta catástrofe no existen planes de protección para las personas trabajadoras del campo que habitan principalmente en asentamientos en condiciones de absoluta precariedad”, denuncia el manifiesto, citando el testimonio de las Jornaleras de Huelva en Lucha, quienes llevan tiempo alertando sobre la falta de derechos y protección para las personas trabajadoras del sector agrícola en España.
Los colectivos antirracistas reunidos en el Otoño Antirracista y Anticolonial han organizado actividades y talleres en semanas recientes para concienciar sobre la necesidad de una sociedad que no solo sea inclusiva, sino que también asuma una postura activa en contra del racismo. Para ellos, el auge de la extrema derecha en España no es un fenómeno aislado, sino un síntoma de problemas más profundos que deben ser enfrentados con firmeza y unidad. Los convocantes de la marcha consideran que la propagación de bulos y el discurso de odio solo generan divisiones que debilitan a la sociedad y que, ante tragedias como la ocurrida en la Comunidad Valenciana, se necesita unidad y solidaridad, no discursos que dividan.
La marcha de este sábado es, en suma, una movilización que busca poner sobre la agenda pública la urgencia de implementar políticas antirracistas, feministas y sociales que protejan y dignifiquen a todas las personas, especialmente a aquellas que, por su condición migratoria o situación económica, se encuentran en situación de vulnerabilidad. Para quienes marcharán desde Neptuno hasta Callao, el antirracismo no es solo una cuestión de derechos humanos, sino una condición fundamental para una sociedad más justa y resiliente.
