Una nueva investigación ha determinado que las enigmáticas ráfagas rápidas de radio (FRB), señales que llegan desde el espacio sin una fuente fácilmente identificable y que muestran extraños ritmos y pulsos, tienen más probabilidades de provenir de galaxias con poblaciones estelares relativamente jóvenes. Llegarían desde galaxias formadoras de estrellas masivas y estarían relacionadas con los magnetares.
Científicos del Instituto Tecnológico de California (Caltech), en Estados Unidos, han concluido en un estudio publicado recientemente en la revista Nature que las ráfagas rápidas de radio (FRB), señales cósmicas cuyo origen desvela a los astrónomos desde su descubrimiento en 2007, provendrían en mayor medida de zonas de formación de estrellas masivas en galaxias relativamente jóvenes, según se desprende de datos obtenidos mediante el sistema de radiotelescopios Deep Synoptic Array-110 (DSA-110).
Desde regiones de formación de estrellas masivas
Según una nota de prensa, al indicar que las FRB llegarían principalmente desde galaxias formadoras de estrellas masivas en lugar de galaxias de baja masa, el estudio también sugiere nuevas hipótesis sobre cómo se forman los magnetares, gigantescas estrellas de neutrones hipermagnetizadas que estarían directamente implicadas en las ráfagas de radio. Al mismo tiempo, la información sugiere que las FRB no deberían relacionarse con señales emitidas por algún tipo de inteligencia extraterrestre, sino que serían fenómenos astronómicos naturales.
En concreto, el trabajo sugiere que los exóticos magnetares, estrellas muertas con campos magnéticos 100 mil millones de veces más fuertes que la magnetosfera de la Tierra, se crearían cuando dos estrellas se fusionan y posteriormente explotan, formando una supernova. Hasta el momento no estaba claro si los magnetares tenían ese origen o solamente surgían con la explosión de una única estrella.
Metales y magnetares
Otro punto clave es que las galaxias masivas, de las cuales provendrían mayoritariamente las FRB, tienden a ser ricas en metales, porque estos elementos insumen un tiempo considerable hasta acumularse a lo largo de la historia cósmica. Como las FRB son más comunes en estas galaxias ricas en metales, esto implica al mismo tiempo que los magnetares, cuyas emisiones generarían las ráfagas rápidas de radio, también son más habituales en este tipo de galaxias.
De acuerdo a un artículo publicado en Science Alert, los resultados del nuevo estudio muestran que los ambientes estelares jóvenes y masivos son importantes para la formación de progenitores de señales FRB. De lo contrario, los investigadores habrían observado una distribución más amplia de las FRB entre los distintos tipos de galaxias. Además, como los magnetares emisores de FRB podrían formarse a partir de fusiones de estrellas binarias, resulta mucho más probable que esto ocurra en entornos con estrellas más masivas, como las galaxias que identificaron los científicos.
Referencia
Preferential occurrence of fast radio bursts in massive star-forming galaxies. Kritti Sharma et al. Nature (2024). DOI:https://doi.org/10.1038/s41586-024-08074-9