El Ayuntamiento de Mieres planea incorporar el aparcamiento de Oñón a la red urbana de zona azul. Los planes municipales pasan por aplicar el sistema de rotación gratuita a esta céntrica bolsa de estacionamiento, con capacidad para 300 vehículos. La única duda al respecto que tiene el gobierno local se centra en decidir si la medida afectará por completo a la citada bolsa de estacionamiento o solamente a una parte de ella, en todo caso, mayoritaria.
El gobierno local pretende descongestionar el acceso a los aparcamientos en el centro de la ciudad, una problemática que se ha acentuado recientemente con la ampliación de las peatonalizaciones en el centro de la ciudad. El desarrollo y ejecución de la nueva red urbana de aparcamientos le ha costado al Ayuntamiento de Mieres casi 900.000 euros y su desarrollo llevó cerca de dos años y medio entre tramitaciones administrativas y obras. Con todo, las más de 700 plazas habilitadas en el centro urbano no parecen haber logrado absorber los aparcamientos que se han perdido con la eliminación de las grandes fincas de tierra que ofrecían este servicio.
El Ayuntamiento ha detectado que el aparcamiento de Oñón no está cumpliendo correctamente con la función para la que fue concebido. En concreto, la administración local ha percibido que este gran parking no genera flujo circulatorio: «Los estacionamientos permanecen saturados durante todo el día sin facilitar la rotación», apuntan los portavoces municipales consultados por este diario. Dicho de otra manera, muchos vecinos han pasado a utilizar el aparcamiento de Oñón como un garaje debido a que no hay límite de tiempo en lo referente a la ocupación. Se trata de un problema concreto de Oñón, ya que en el otro gran aparcamiento urbano de reciente desarrollo, el que La Mayacina, se ha constatado que sí se genera movilidad más allá de que «pueda saturar durante las mañanas».
Los gestores municipales vienen detectando que sigue resultando complicado encontrar aparcamientos en el centro de la ciudad. Las más de 700 plazas habilitadas en el centro urbano no parecen haber logrado absorber los aparcamientos que se han perdido con la eliminación de las grandes fincas de tierra que ofrecían este servicio. También han sido eliminados aparcamientos con las citadas peatonalizaciones de las calles del entorno de la plaza. Uno de los problemas radica en que tanto los nuevos aparcamientos de La Mayacina como el de Oñón, con unas 600 plazas con conjunto, permiten el estacionamiento libre, cuando buena parte de las plazas eliminadas eran de rotación. Así, el parking de Oñón pasará a funcionar como ya lo hacen los del Sianguas y la Pista, es decir, con un periodo máximo de dos horas de uso. La decisión está tomada, aunque aún no hay plazos.
El aparcamiento de Oñón lleva ya un lustro en servicio, concretamente desde mayo de 2019. La actuación contó con un presupuesto de 215.504 euros, cofinanciados en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). La actuación incluyó no solo la creación de un aparcamiento para 300 vehículos, sino también una serie de actuaciones centradas en la mejora de los accesos y la circulación viaria, así como para dotar de servicios la explanada. Aquí se incluyó, entre otras medidas, un sistema de control de plazas, puntos de recarga de vehículos eléctricos y un nuevo sistema de alumbrado. Si bien el Ayuntamiento de Mieres ha optado hasta ahora por permitir el estacionamiento libre en Oñón, el sistema de gestión del equipamiento se cambiará por la zona azul gratuita característica de Mieres. Se podrá aparcar sin abono de tarifa durante dos horas. Ahora bien, el incumplimiento del límite conlleva una sanción de 80 euros.
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