Cuando las cosas están claras el Tribunal Supremo no necesita apenas tiempo para tomar una decisión. En solo dos semanas la Sala Segunda ha aceptado la exposición razonada remitida por el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno para imputar al exministro José Luis Ábalos en el caso Koldo, ya que al ser diputado es aforado y solo puede ser investigado y, en su caso, juzgado por el alto tribunal. El procedimiento contra personas no aforadas continuará en la Audiencia Nacional.
El magistrado remitió el pasado 23 de octubre una exposición razonada con toda la causa ante los “indicios fundados y serios” del “papel principal” jugado por el exministro en la trama de corrupción a la que hasta ahora al menos ha dado nombre el que era su asesor Koldo García Izaguirre.
En su exposición razonada, el titular del Juzgado Central de Instrucción 2 atribuía a Ábalos una “imputación clara y concreta” a través de una serie de indicios que evidencian su presunta participación en delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de influencias y cohecho-. Ahora, el Supremo suma un posible delito de malversación de caudales públicos. El magistrado subrayaba la imposibilidad de continuar la instrucción sin realizar diligencias de investigación que afecten de manera directa al diputado.