“La situación en Valencia sigue siendo complicada”, sentencian los medios de comunicación franceses, que miran con preocupación la catástrofe de Valencia y la lentitud de las autoridades en los trabajos de reconstrucción en las zonas más afectadas. Una situación que inquieta a los españoles, pero también a los franceses. Ambos países son aliados comerciales esenciales: Francia es el principal cliente de España, y España es su principal proveedor.
El 30 de octubre, la DANA arrasó con todo lo que encontró a su paso, incluyendo los campos de cultivo, que son una de las principales fuentes de ingresos de Valencia, que desde entonces está en pausa. Una paralización que afecta directamente a los supermercados de Francia que ya han avisado a sus clientes de la penuria de algunas frutas y verduras: “Debido al mal tiempo en España, determinadas frutas y verduras pueden faltar temporalmente en los lineales”, se lee en la aplicación y en las diferentes redes sociales de Carrefour desde el pasado lunes. La firma ha querido aclarar para Le Figaro que este mensaje es simplemente “preventivo” y que “todo ha vuelto completamente a la normalidad”.
Los cítricos valencianos, las naranjas por ejemplo, son las frutas más exportadas de España, y Francia es uno de los países que más las demanda junto con Alemania. En 2023, las exportaciones españolas de bebidas y agroalimentos alcanzaron los 67.209 millones de euros, un crecimiento del 4,6% respecto al año anterior.
A pesar de que la excandidata a la presidencia de Francia Ségolène Royal diga que “los tomates españoles son incomibles”, Francia juega un papel importante dentro de esas exportaciones, ya que representa el principal mercado para las frutas y verduras españolas, generando un relevante volumen de beneficios para nuestro país.
Ahora, tras el paso de la DANA más violenta registrada en la historia de España, el sector agrícola empieza a hacer balance de las pérdidas, que en algunas zonas de Valencia se acercan al 100% y que se contabilizan por millones de euros, según datos de organización agraria española COAG. La falta de producto también influirá en las próximas semanas en el precio de algunas frutas y verduras, según los expertos: «La temporada comenzó con naranjas. Esto reduce considerablemente los volúmenes en kilos. Y lo poco que queda cuesta inevitablemente una fortuna. A menos que intervenga un país vecino, esto corre el riesgo de tener un impacto muy significativo en el precio final», explicó este miércoles en Europa1, David Besnard, que trabaja en una empresa de importación y exportación de frutas en el mercado internacional de Rungis, situado a las afueras de París.
Las exportaciones francesas sufren el cambio climático
Al desastre que vive Valencia, se suma el catastrófico año agrícola que también ha experimentado Francia, como consecuencia de sequías históricas y lluvias torrenciales.
Según estimaciones provisionales del ministerio de Agricultura francés, la producción de cereales debería caer en 10 millones de toneladas, un 25% menos que el año pasado. Otro de los grandes sectores afectados por las lluvias intensas y el granizo ha sido el sector vitícola. La producción de vino se situaría este año entre 40 y 43 millones de hectolitros, un nivel inferior entre un 10% y un 16% con respecto a 2023, informa Agreste. Unos datos que sitúan a las cosechas de este 2024, como las más bajas de los últimos 40 años.