El portavoz del grupo municipal socialista en Santiago se muestra «tranquilo» tras declarar ante el instructor encargado de tramitar el expediente abierto por el PSOE a los seis concejales que rompieron en el pleno del pasado 14 de junio la disciplina de voto marcada por la dirección local. Con el foco puesto «en seguir trabajando en defensa de los intereses de los vecinos de la capital gallega», Gonzalo Muíños defiende la coherencia de su posición y confía en que el proceso abierto se resuelva «sin consecuencias» para los seis ediles que optaron por la abstención en la ordenanza sobre la comunicación de las viviendas de uso turístico (VUT) y se posicionaron a favor de la medida, cuando el secretario general de la agrupación, Aitor Bouza, ordenó la abstención. Hasta el momento, Muíños ha sido el único edil del grupo socialista que ha declarado -hace dos semanas- ante Moisés Rey, el encargado de instruir el expediente abierto a los seis concejales díscolos.
«Fuimos coherentes, teniendo en cuenta que estaba en juego la regulación de las viviendas turísticas en Santiago, una iniciativa que pusimos en marcha durante el pasado mandato, con lo cual, si el proceso es garantista, no debería tener consecuencias», sostiene Muíños, quien, no obstante, admite que la decisión final ya no depende de él. «Durante la declaración ante el instructor defendí que nos mostramos coherentes al abordar una cuestión que defiende nuestro partido a nivel local, autonómico y nacional», subraya el portavoz del grupo municipal socialista en la capital gallega.
Lo hace solo unas horas después de que el pleno del Concello de Santiago aprobase este lunes de forma definitiva la ordenanza que regula la comunicación de las viviendas de uso turístico (VUT) con el voto favorable del BNG, Compostela Aberta (CA) y PSOE, mientras que los populares la rechazaron. Durante la sesión plenaria, el grupo municipal socialista reafirmó su postura respecto a esta cuestión y la concejala Mercedes Rosón destacó que esta ordenanza servirá para «aliviar» la problemática de acceso a la vivienda en la capital gallega «para suerte de todas las personas que queremos vivir aquí», indicó. No obstante, indidió en que «todavía quedan muchísimos retos por delante para garantizar el derecho a la vivienda«. Para ello, Rosón aboga por declarar Santiago como zona tensionada.
Por parte del gobierno local, el edil de Urbanismo, Iago Lestegás, defendió que es «crucial» limitar este tipo de viviendas y señaló que las medidas tomadas por el Ejecutivo local «avanzan en la buena dirección» y «dan sus frutos», ya que «la oferta de vivienda ya nota el retorno de inmuebles que se dedicaban al alquiler turístico». Además, demandó a la Xunta que haga su parte y que «dé de baja del registro las viviendas que carezcan de licencia municipal». En este sentido, aseguró que ha solicitado una reunión con el director de la Axencia de Turismo de Galicia y que todavía no ha recibido respuesta.
En la misma línea se expresó la concejala de Dereitos Sociais, María Rozas (CA), que reivindicó que desde este lunes se puede mirar el futuro de Santiago «con más optimismo». «No queremos expulsar a los turistas. Se trata de garantizar a los compostelanos un lugar en el que vivir. No será de hoy para mañana, pero las cosas se van moviendo. Se incorporaron al mercado tradicional entre 70 y 90 inmuebles en los últimos meses y estoy segura de que serán más», afirmó.
«Gran error»
Por su parte, el portavoz popular, Borja Verea, afirmó que este lunes se consumó «ese gran error» que, a su juicio, «significa que prácticamente todas las viviendas de Santiago puedan ser durante dos meses una VUT y convertir Santiago en una barra libre de viviendas turísticas«.
Para Verea, esta medida «no va a mejorar la política de vivienda, ni la de turismo, ni la de rehabilitación» y se trata de «un error» que se suma a «otras decisiones erróneas» que dejan «el triste panorama actual del casco histórico». «Ninguno de los 25 concejales quiere más al casco histórico de mi ciudad que yo, habrá gente que lo pueda querer igual, pero nadie lo quiere más que yo», señaló el líder del PP de Santiago, que incidió en que el grupo popular quiere un casco histórico «que recupere su alma familiar, residencial y habitable».
Críticas de los propietarios de VUT
Durante el pleno de este lunes, Estrella Ferreiro habló en representación de los propietarios viviendas de uso turístico en Santiago, y durante su intervención afeó a Lestegás que mantenga «conductas que son éticamente reprochables». «Más de 6.198 viviendas vacías, pero el problema para esta corporación está en las 681 VUT inscritas en el REAT (Registro de Empresas y Actividades Turísticas de la Xunta)», destacó antes de añadir que «las consecuencias de este error» las seguirán «sufriendo todos los actores implicados».
Asimismo, acusó al gobierno local de «abrir la veda a fondos de inversión alemanes» e insistió en pedir que «dejen de utilizar» a los propietarios de VUT como «chivos expiatorios de sus fallos en la gestión pública». «Sugerimos que hagan diagnósticos correctos para paliar el problema de la vivienda mediante medidas adecuadas. Cumplan lo prometido antes de las elecciones», concluyó.