El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo compareció en una Declaración Institucional desde la sede Génova que suplió a la rueda de prensa posterior al Comité de Dirección programada. Lo hizo para abordar las secuelas de la DANA en la Comunidad Valenciana, que se ha saldado con una infinidad de destrozos materiales en calles y viviendas, pero también con al menos 217 víctimas —en la reunión se ha realizado un minuto de silencio por ellos—. Intervino un día después de los insultos a la comitiva de los Reyes, el presidente del Gobierno —que fue evacuado tras recibir en la espalda el lanzamiento de un palo— y el de la Generalitat ayer en Paiporta.
Feijóo quiso trasladar su rechazo a «participar en relatos partidistas» o a «entrar en contiendas para desviar el foco» con los socialistas. Consideró que en estos momentos el debate debe estar nada más que «en el pueblo español». «No vamos a equivocarnos sobre quiénes son las victimas reales […] ni voy a caer en nuevas críticas al Gobierno. Ya saben lo que pienso». Con todo, el líder del PP sí ha cuestionado que no se decrete el estado de «emergencia nacional». «Si esto —la crisis valenciana— no lo es, ¿entonces qué?».
La aplicación de esa emergencia nacional, de querer aplicarse, pasaría por el Ministerio de Interior. Y debería de ser elevado a un nivel 3. A su vez, esto quitaría las competencias sobre el terreno al presidente de la Generalitat y se las otorgaría al Ejecutivo central a través de Fernando Grande-Marlaska. De momento, Carlos Mazón lo ha evitado. No hubo ninguna referencia de Feijóo al presidente autonómico, de sus siglas.
El popular se puso a disposición del Ejecutivo nacional, como principal partido y al frente de la mayoría de administraciones autonómicas para ofrecer ayuda y colaborar en todo lo necesario para ayudar a afrontar el desastre tras la DANA. Agradeció que el Gobierno sí vaya a trasladar la información con lo que cuenta esta tarde a los grupos del Congreso de los Diputados. Una actitud distinta a la mantenida por su barón valenciano. Esa disposición de Feijóo contrasta, en todo caso, con las posiciones adoptadas esta misma mañana desde Valencia por el propio Mazón, que sí se centró en descargar responsabilidades. Y no dio pie a una demanda similar a la de su presidente pese a ser preguntado por ello, lo que evidencia que no ha habido, al menos, diálogo reciente esta mañana antes de sus declaraciones en dos entrevistas matinales.
Ante el desasosiego ciudadano, Mazón afirmó que reclamó desde el primer momento «toda la ayuda posible» al Gobierno. Pasó, con ello, a la ofensiva contra Moncloa. De hecho justificó la tardanza de actuación de su Administración por la desactivación que hizo la Confederación Hidrográfica del Júcar —del Ministerio de Transición Ecológica— de la alerta roja en hasta tres ocasiones. También acusó la falta de independencia del mando militar, de la UME, para trasladar más efectivos si se aprecian que son necesarios. «Una vez se activa la UME —el martes a las 15:21— nadie necesita que un gobierno autonómico pida refuerzos. Es el mando operativo de la UME el que si necesita más refuerzos llama a Torrejón. Cómo va a depender del presidente de la Generalitat que cada día pida 500 o 1.000 efectivos», cuestionó Mazón.
La institución ha negado esa versión: «Las confederaciones hidrográficas no lanzan alertas públicas. El organismo competente para lanzar alertas hidrológicas son los servicios de emergencias autonómicos». Y, por tanto, se acusa a Emergencias de la Generalitat de no activarla pese a contar con datos desde la mañana del 29 de octubre. Sin entrar en una alusión directa a este asunto, Feijóo mencionó a Mazón una vez en su discurso. Para «reconocer a las administraciones que han sabido cooperar unidas en el CECOPI», caso de «Ayuntamientos, Generalitat y departamentos del Gobierno […] lideradas por el president que allí están trabajando». A primera hora de la jornada el Gobierno situó los siete ministros solicitados por el popular para la constitución de los grupos de respuesta de la DANA.
Feijóo demanda un ‘Plan Valencia’
Al dejar clara esa disposición a un trabajo conjunto, Feijóo lanzó «consideraciones al Gobierno» para que las tengan en cuenta para la reunión del Consejo de Ministros de mañana. La primera es que «cuenta con el apoyo» del PP «para las acciones que garanticen la mejor atención» a la ciudadanía valenciana así como la de otros puntos geográficos afectados por la DANA. Se piden «ayudas a ayuntamientos, administraciones, autónomos y sectores productivos» para paliar en lo posible las pérdidas. «El Gobierno tiene mecanismos para ello», acreditó el gallego.
A la declaración de emergencia nacional, se unió un tercer punto: la colaboración conjunta para pedir más ayuda a la UE. El PP es una de las más representadas dentro del EPP. Los populares se sirven de enlace también con Ursula von der Leyen. Por último, se apuesta por ese ‘Plan Valencia’ para un «rediseño de las zonas afectadas». «Para dar respuesta a esta situación» el Gobierno «tiene nuestros votos».
Estar «todos a una»
Feijóo reclamó «estar todos a una» con la ciudadanía. Y advirtió de que «esto no ha acabado» porque sigue habiendo «zonas en riesgo» por altas precipitaciones. Sobre todo en Cataluña. A sus ciudadanos les pidió «precaución», apreciando que se cuenta con información para estar en «alerta». Consideró que «habrá más víctimas» conforme se pueda ir accediendo a determinados lugares colapsados.
El dirigente popular, ante lo acontecido el domingo con Sánchez, Mazón y los Reyes en Paiporta quiso hacer una reflexión. Asumió que «durante mucho tiempo la política ha quedado reducida a la competencia partidista» entre otros aspectos secundarios. «Se pierde el tiempo en discusiones, propagandas, burocracia y esperas absurdas que los ciudadanos no entienden». Pero ahora es el momento de «poner todo por nuestra parte para que esté a la altura de las circunstancias y del pueblo». Que vive en un estado de «incertidumbre» porque ve que «la respuesta no llega» y «han perdido a familiares y a seres queridos». «No puede no haber desasosiego.
Gritar de rabia y dolor es absolutamente comprensible frente a una catástrofe así. Nada es suficiente». Dijo Feijóo que «es el momento de hacer una política útil, colaborativa y sincera, que pueda mirar a los ojos a la gente y compartir sus sentimientos«. De ahí el mandatario popular pasó a reconocer el papel de Felipe VI y la reina Leticia, que atendió a la ciudadanía en la calle.
