La vicepresidenta segunda del Gobierno y líder de Sumar en el Gobierno, Yolanda Díaz, asegura que fue ella quien le pidió el acta de diputado a Íñigo Errejón y quien le cesó «de todas sus actividades orgánicas», pese a que ella ya no tiene un cargo dentro del partido.

Según ha confirmado este lunes, Díaz conocía las primeras acusaciones que en 2023 se vertieron contra su portavoz parlamentario, pero no intervino al suponer que la investigación correría a cargo de Más Madrid, partido al que entonces pertenecía el diputado. Fue advertida, según ha confirmado ella misma, por la secretaria general de Podemos, Ione Belarra.

En sus primeras palabras cinco días después de conocerse la noticia, la vicepresidenta ha aclarado que las acusaciones anónimas contra su ya exportavoz parlamentario se le comunicaron «a última hora del día» del martes, un día antes de emprender un viaje a Colombia que duró hasta el sábado. El miércoles llamó a Errejón.

«Fue una de las conversaciones más difíciles de mi vida», ha asegurado la vicepresidenta a la salida de la reunión del grupo parlamentario este lunes, de casi dos horas y media de duración. La reunión, dicen fuentes presentes, fue más «de diagnóstico y de compartir opiniones sobre la crisis» que de tomar decisiones a futuro. Una de ellas sería la sucesión de Errejón como portavoz parlamentario.

Según Díaz, Errejón le «reconoció actitudes machistas y vejatorias contra las mujeres» y, desde ese momento, los mecanismos fueron inmediatos. Siempre a tenor del relato de la vicepresidenta, el partido tardó dos días (desde el martes por la noche) en expulsar a su portavoz desde que «se dieron a conocer las denuncias», pese a que el mensaje que lo desató todo era visible para todos desde el lunes. 

La líder de Sumar en el Gobierno ha enviado también «un mensaje de apoyo a todas las mujeres que están contando sus historias». «El feminismo y las mujeres han cambiado este país a mejor», ha declarado, «y no va a haber impunidad, se llame como se llame: caiga quien caiga«, ha reiterado.

«No abrimos ni siquiera un expediente administrativo», ha recalcado la vicepresidenta, quien se desvincula también del comunicado de renuncia que Errejón publicó «unilateralmente» en sus redes sociales. «Hemos actuado con prontitud y contundencia», ha aseverado, «pero hemos llegado tarde y por eso pido disculpas».

Errejón dimitió de todos sus cargos el pasado jueves tras ser acusado por varias mujeres de «maltrato psicológico» y «agresión sexista». A estas denuncias se le unió otra, ya pública y en el juzgado, de la actriz Elisa Mouliaá esa misma noche. 

Fuentes de Sumar aluden también a que las primeras acusaciones se dieron a conocer el lunes 19 de octubre de ese año, esto es, el mismo día en que se publicaban las listas electorales a las elecciones del 23J. Las fuentes consultadas estos días se aferran a que activaron «todos los mecanismos» para cerciorarse de si aquellas denuncias anónimas eran ciertas, sin llegar a una conclusión.

Podemos fue uno de los partidos de la coalición que «avisó» a Sumar de las acusaciones contra Errejón, aunque por entonces dichas acusaciones no se trataban más que de un hilo de Twitter visible para todos. Díaz ha criticado a la formación, sin nombrarla explícitamente, por «intentar sacar rédito político» de la situación de su portavoz.

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