Este lunes, Ana Terradillos abordó en ‘La mirada crítica’ las acusaciones de agresión sexual contra el expolítico Íñigo Errejón tras la denuncia presentada por la actriz Elisa Mouliaá, quien fue la primera en hacer público lo ocurrido. La presentadora de Telecinco comentaba en el matinal que «me cuesta asimilar la doble vida que llevaba este señor», haciendo referencia a las diferencias entre su vida pública y los hechos denunciados.

En el programa, se presentó el testimonio de una presunta víctima que decía que «tardé tiempo en darme cuenta de que no era yo lo que él deseaba, sino mi sometimiento», ilustrando una de las múltiples denuncias que han salido a la luz. Segun los tertulianos, este tipo de testimonios evidencian una profunda contradicción entre la figura pública del político y su conducta privada.

Terradillos expresó su indignación por lo relatado, calificando el comportamiento descrito como propio de un «psicópata narcisista». En este sentido, Esther Palomera coincidió, mientras que otros colaboradores como Carlos Cuesta matizaron que “una persona que hace esto no está loca”, sino que actúa con intenciones claras y conscientes. «Esto es de un tío que está loco», reafirmó Terradillos, mostrando su indignación por los presuntos actos del expolítico.

Por su parte, Sol Sánchez, exdiputada de Unidas Podemos, comentó que una actitud misógina no debería ser compatible con una posición de liderazgo en un partido de izquierda. «Cualquier misógino no puede ser dirigente de la izquierda», aseguró Sánchez, destacando la importancia de la coherencia entre los ideales que se defienden públicamente y el comportamiento personal de quienes lideran estos movimientos.

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