Al FC Barcelona de Hansi Flick poco menos le dijeron que si quería entrar en el Bernabéu tenía que dejar fuera su táctica suicida. Lo que algunos consideraban como un desacato a la autoridad y que se convirtió en un arma arrojadiza fundamental para tumbar al Real Madrid en el Bernabéu. Ancelotti dijo que nada ni nadie le quitaba el sueño, pero esta semana tendrá pesadillas con los fueras de juego. Hasta en 12 cayó el conjunto blanco, con Mbappé a la cabeza de las infracciones (8). La trampa azulgrana funcionó a las mil maravillas para retratar a un equipo que ni siquiera fue capaz de imponerse en lo físico.

Fuente