No hace tanto tiempo atrás el Castellón visitaba Zaragoza para jugar ante el Ebro en Segunda División B, este sábado el cuadro albinegro regresaba a uno de los estadios más clásicos del fútbol nacional, La Romareda. Precisamente allí, hace tres temporadas, el equipo de la capital de la Plana firmó su virtual descenso a Primera Federación.
Conviene contextualizar la realidad con el pasado para poner en valor el presente que vive hoy la escuadra castellonense, que está asombrando a propios y a extraños en Segunda División. El Castellón se impuso a uno de los gallitos de la categoría con goles de Alberto Jiménez e Israel Suero, ambos a pase de Calatrava, triunfo que le coloca en zona de promoción.
En Zaragoza el técnico neerlandés realizó dos variaciones en su once inicial, con el regreso al equipo titular de Douglas Aurélio, Óscar Gil y Calavera. Así, los albinegros formaron con Gonzalo bajo palos; Óscar Gil, Alberto y Willems en defensa. Por delante actuaron Calavera, Calatrava y Van den Belt, con Chirino y Douglas Aurelio en bandas; y Raúl Sánchez y Mamah en la parcela ofensiva.
Y el partido no pudo comenzar mejor para los intereses albinegros, y es que cuando apenas se llevaban disputados 55 segundos llegó 0-1. Calatrava sirvió un córner para servir una asistencia más, y ya van siete este curso, para que Alberto, con pierna izquierda, batiera al meta Poussin.
Jarro de agua fría
Pero comenzar bien no es sinónimo de victoria, máxime en una categoría tan exigente como la Segunda División. Y tan solo siete minutos después Liso firmó el empate para el cuadro maño. Una falta, como mínimo dudosa de Óscar Gil, originó la jugada del gol, eso sí, con otro error de bulto de por medio. No estuvo acertado Willems en el rechace y le quedó franca la bola a Liso para marcar ante Gonzalo Crettaz.
Tras el empate, los aragoneses buscaron los espacios a la espalda de la defensa y los encontraron, los atacantes locales eran un dolor de muelas para la zaga albinegra. En este contexto Azón tuvo el 2-1, tanto que evitó Gonzalo.
Sin embargo, como era previsible, el partido comenzó a bajar revoluciones con el paso de los minutos, aunque los zaragozanos tenían la portería entre ceja y ceja y cuando recuperaban buscaban con todo la meta de Gonzalo que volvió a aparecer para abortar una ocasión de Bazdar. Por su parte, al equipo de Dick Schreuder le costaba llegar en exceso al área rival, y cuando lo hacía no terminaba de encontraba el último pase. Solo Raúl Sánchez, pasada la media hora de la primera parte, tuvo opción de encañonar el cuero pero su disparo se marchó desviado.
Sufría el Castellón, en especialmente por las bandas, eso sí, los de la capital de la Plana jugaban con personalidad en el campo de uno de los candidatos al ascenso a Primera División, amén de ser el máximo goleador de la categoría. Pese a ello, el Castellón se mantenía firme pese a las acometidas locales, a última del primer acto en las botas de Bazdar que recogió el meta Gonzalo Crettaz.
La mano de Dick
No le gustó la primer parte a Dick Schreuder, fruto de ello realizó dos cambios, dio entrada a Salva Ruiz, que se colocó en defensa, y De Miguel, que relegó a Mamah a la banda derecha, se marcharon dos de los tres jugadores amonestados, Willems y Óscar Gil.
El caudal ofensivo se redujo en la segunda parte, aunque el Castellón jugó con una marcha más en los segundos 45 minutos, aunque solo Calatrava se mostraba incisivo, que buscaba la portería contraria siempre que tenía opción. Buscaba dar un paso hacia adelante Dick Schreuder, metió a Suero, que no estaba para disputar los 90 minutos, por un anodino Douglas.
La conexión Suero-De Miguel revitalizó al equipo en la parcela ofensiva pero el equipo de Víctor Fernández se mostraba muy seguro en defensa, aunque a diferencia del primer tiempo, las llegadas mañas sobre la meta de Gonzalo menguaron.
Pero pasada la media hora del segundo tiempo, concretamente en el minuto 78, Calatrava volvió a frotar la lámpara para hacer magia y poner un balón de oro, ahí donde duelo para el rival, en la frontal del área chica, para asistir a Israel Suero, que embocó a gol para volver a poner por delante a los albinegros. Octava asistencia para el catalán, tercer gol en dos partidos para el medio madrileño.
El gol rubricaba el crecimiento del Castellón en una segunda parte en la que en defensa seco a los atacantes zaragozanos, y en ataque tuvo más presencia. Pero pese al escenario, el cuadro orellut tuvo que saber gestionar y, sobre todo, sufrir, en los minutos finales del encuentro para llevarse los tres puntos de La Romareda, algo que no conseguía desde la temporada 1972/73. El Castellón vuelve a dormir en promoción de ascenso.
Suscríbete para seguir leyendo