Acababa de pasar de la media hora de encuentro el marcador cuando Kylian Mbappé se quedó solo, un tanto escorado, frente a la portería de Iñaki Peña. En ese momento, el galo decidió picar el balón tras un par de fallos flagrantes y marcó lo que todo el Bernabéu creyó que era el primer gol del encuentro.
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Sin embargo, tras la revisión en el fuera de juego automático, se detectó que el francés estaba en posición incorrecta en el momento en el que Lucas, el asistente de la jugada, daba el pase.
De esta manera, el árbitro anuló el gol e incluso la celebración con rabia que ya habían protagonizado Vinicius, Bellingham y Mbappé que incluso lo celebró haciendo el signo de la ‘picadita’ pese a que el gol no era válido.
