En los primeros meses de este año, Rusia entregó información satelital a los islamistas hutíes de Yemen para facilitar ataques a barcos en el mar Rojo, según reveló el Wall Street Journal el jueves.

Según el periódico estadounidense, que cita a “una persona familiarizada con el asunto” y a dos funcionarios de defensa europeos no identificados, los datos fueron suministrados por miembros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán en Yemen, quienes los usaron para guiar misiles y drones en ataques dirigidos a embarcaciones.

Los Hutíes, que son respaldados por Irán y controlan extensas zonas de Yemen, comenzaron a atacar embarcaciones comerciales en el mar Rojo en apoyo a los palestinos, en medio de la guerra en Gaza desencadenado por el ataque terrorista de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023.

Esta serie de ataques ha reducido significativamente el tráfico en esta ruta marítima de gran importancia estratégica.

Como respuesta, Estados Unidos y Reino Unido desplegaron una coalición naval en la región y realizaron bombardeos contra posiciones hutíes en Yemen.

A lo largo del último año, los Hutíes han ejecutado más de 100 ataques en esta zona, dejando un saldo de cuatro marineros muertos, dos barcos hundidos y una embarcación con su tripulación secuestrada desde noviembre pasado.

Putin busca contrarrestar el aislamiento internacional tras la invasión de Ucrania

Las FDI hallan un escondite con cartas escritas y recibidas por Sinwar
Partidarios hutíes levantan un cartel del líder de Hamas, Yahya Sinwar, asesinado por tropas israelíes en Gaza, durante una manifestación contra Israel en Saná, Yemen, el viernes 18 de octubre de 2024. (Foto AP/Osamah Abdulrahman)

El presidente ruso, Vladimir Putin, ha intentado enfrentar el aislamiento político y económico que Occidente impuso a Rusia después de la invasión de Ucrania en 2022.

El informe del Journal surge poco después de una cumbre de los países BRICS, un grupo diplomático que agrupa a nueve naciones, representando casi la mitad de la población global, entre las que se incluyen China, India e Irán.

Durante su intervención en la cumbre BRICS, Putin alertó a los líderes sobre la posibilidad de una guerra a gran escala en Oriente Medio, en el contexto de la esperada respuesta de Israel ante el reciente ataque con misiles balísticos lanzado por Irán contra el país.

La cumbre, que tuvo lugar en Kazán, Rusia, reunió a más de 20 líderes, incluidos el presidente chino Xi Jinping, el primer ministro indio Narendra Modi y el presidente turco Tayyip Erdogan, evidenciando la fortaleza de las relaciones de Rusia fuera del ámbito occidental.

La mayoría de las discusiones en la cumbre se centraron en la guerra en Ucrania y la violencia en Oriente Medio, aunque no se presentaron indicios de acciones concretas para resolver ninguno de los conflictos.

“La confrontación entre Israel e Irán ha aumentado de manera drástica. Todo esto parece una reacción en cadena y coloca a toda la región de Oriente Medio al borde de una guerra a gran escala”, afirmó Putin mientras se encontraba al lado del presidente chino Xi Jinping.

Xi Jinping demanda alto el fuego en Gaza y solución de dos Estados

El presidente ruso, Vladimir Putin, el presidente chino, Xi Jinping, y otros líderes posan para una foto familiar durante la cumbre BRICS en Kazán el 24 de octubre de 2024. (Maxim Shipenkov/Pool/AFP)
El presidente ruso, Vladimir Putin, el presidente chino, Xi Jinping, y otros líderes posan para una foto familiar durante la cumbre BRICS en Kazán el 24 de octubre de 2024. (Maxim Shipenkov/Pool/AFP)

Tras las declaraciones de Putin, el presidente chino, Xi Jinping, afirmó que es necesario establecer un alto el fuego integral en Gaza, detener la expansión de la guerra en Líbano y volver a la solución de dos Estados, que permitiría la creación de naciones tanto para Israel como para los palestinos.

El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, criticó a las organizaciones internacionales, especialmente a las Naciones Unidas, por su incapacidad para poner fin al conflicto iniciado por el grupo terrorista Hamás, que representa.

“Las llamas de la guerra continúan ardiendo en la Franja de Gaza y en las ciudades del Líbano. Las instituciones internacionales, en particular el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, como promotor de la paz y la seguridad globales, carecen de la eficacia necesaria para extinguir el fuego de esta crisis”, afirmó Pezeshkian ante los miembros de BRICS.

Putin advirtió que si los palestinos no logran obtener su propio Estado, sentirán el peso de una “injusticia histórica”, lo que perpetuará una “atmósfera de crisis permanente” en la región y provocará inevitablemente recaídas de violencia a gran escala.

Los líderes del BRICS exigen un Estado palestino viable y condenan a Israel

Esta fotografía proporcionada por la oficina de prensa de la Autoridad Palestina (OPP) muestra al presidente de la AP, Mahmud Abbas (derecha), saludando al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, durante la cumbre del BRICS en Kazán el 23 de octubre de 2024. (Thaer Ghanaim/PPO/AFP)

En la declaración emitida al finalizar la cumbre, los líderes del BRICS exigieron la creación de un Estado palestino soberano, independiente y viable, dentro de las fronteras establecidas en 1967. El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, participó en la cumbre y acusó a Israel de intentar “vaciar” la Franja de Gaza de su población palestina, especialmente en el norte, donde el país ha iniciado una nueva ofensiva contra Hamás este mes.

“Ha pasado un año completo desde la mayor catástrofe que ha sufrido el pueblo palestino desde la Nakba de 1948, que es la guerra israelí en la que se están llevando a cabo crímenes de genocidio y limpieza étnica en la Franja de Gaza”, declaró Abbas durante su discurso.

“Esto forma parte de un plan para despojar al territorio de su gente, especialmente en el norte de Gaza, donde las fuerzas de ocupación están empleando tácticas de hambre para someter a la población”, agregó.

la guerra estalló el 7 de octubre de 2023, cuando terroristas liderados por Hamás llevaron a cabo una invasión en el sur de Israel, y provocó la muerte de aproximadamente 1.200 personas y la toma de 251 rehenes.

Con el objetivo de desmantelar a Hamás y recuperar a los rehenes, Israel ha instado de manera reiterada a los civiles a evacuar las áreas de combate hacia una zona humanitaria establecida en la costa.

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