La autodenominada ya como «revolución de los cepillos» llegó auer a la plaza de Santa Ana. El Pleno del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria vivió una sesión multitudinaria, con el aforo completo en el patio de butacas de las Casas Consistoriales. Entre los asistentes, vecinos de la capital hartos de los problemas que arrastra desde hace unos años el Servicio Municipal de Limpieza; y por otro lado, vecinos a favor de la gestión que ha realizado el concejal de Limpieza, Héctor Alemán, desde que tomara posesión hace poco más de un año.
Mientras la multitud se agolpaba en el Salón Dorado -Carolina Darias tuvo que llamarlos al orden en más de una ocasión-, en la plaza se agolparon vecinos con cepillos, plumeros y fregonas. Una réplica de protestas que en las últimas semanas se han repetido en Triana, Almatriche y El Polvorín. Lo hicieron entre polémicas, quienes estaban allí denunciaron un «boicot» que ha corrido en los últimos días y que incluía «la difusión de carteles fake» con la palabra «suspendido» sobre la convocatoria de la manifestación;además de una recogida de firmas por parte de un asesor del PSOE.
Desde bien temprano, la portavoz del PP, Jimena Delgado, vaticinó que a lo largo del Pleno se verían «las distintas crisis que tiene el Ayuntamiento». Los populares presentaron una reprobación del concejal de Limpieza; votación que se saldó con el rechazo de los 15 ediles del Equipo de Gobierno y el voto favorable de los 12 miembros de la oposición presentes en ese momento, quienes entienden que debe dejar sus funciones.
Fotos con baldeadores en Triana
«En vez de limpiar la ciudad, lo que ha hecho esta semana es limpiar su imagen», señaló Delgado durante su intervención, al tiempo que afirmaba que el edil de Limpieza y la alcaldesa habían hecho «el ridículo» por hacerse fotos con baldeadoras en Triana. «La noticia», en cambio, señaló, «es que cientos de vecinos tengan que salir a la calle a manifestarse con cepillos y fregonas».
El portavoz de CC, David Suárez, denunció la «reducción de la parte pública» de los nuevos contratos, «ustedes, los progresistas, esconden tras la palabra inversión la privatización del servicio». Y es que con los nuevos contratos –cuya inversión asciende a 493 millones de euros-, la parte privada del servicio gana importancia en detrimento de la pública -aunque seguirá siendo mixto-. El portavoz de Vox, Alberto Rodríguez, por su parte, señaló que ya en julio, cuando presentaron una moción en su contra, «perdieron una oportunidad para pedir perdón», momento que a su juicio también desaprovechó ahora.
«Ustedes han hecho oídos sordos a todo el esfuerzo que les cuento cada mes», señaló Alemán durante su intervención, y acusó a la oposición de «crear crispación y enfrentar a diferentes barrios». El edil apostilló que «la mayor inversión en higiene urbana de la ciudad tiene un proceso administrativo largo [siguen a la espera de la Junta Consultiva]». Y a Delgado le dejó un mensaje: «usted es un claro ejemplo de la decadencia política, está proyectando su frustración por no ser alcaldesa».
Chat GPT y representantes vecinales
Delgado acusó al edil de usar «Chat GPT para hacer el discurso» y sugirió que «solo le importa usted y a la ciudad que le parta un rayo», al tiempo que tachaba de convertirla en un «estercolero». Por su parte, Carolina Darias indicó que la tramitación de los contratos es «compleja» y apeló al civismo ante una cantidad de vertidos «imposible [abordar] aunque tengamos una plantilla multiplicada».
Aridane Navarro, representante vecinal ante el Pleno. / LP/DLP
En el Pleno participaron hasta cinco personas; representantes vecinales como Pepi González, de Guanarteme, y Aridane Navarro, del Lomo Apolinario y militante del PSOE, gritaron hasta «vivas» a Alemán y defendieron su gestión. También la presidenta de los comerciantes de Santa Catalina, Angélica Retuerce, «aún siendo conscientes de que se deben incrementar las actuaciones, en la actualidad se están haciendo cosas tras años de abandono».
Mientras, en la calle, Isabel Bas, representante de los vecinos de Triana que se están manifestando los jueves, y representantes del Pacto Vecinal, denunciaron la necesidad de mejorar la limpieza en toda la ciudad, que esta «sea programada y transparente», además de mejoras en materia de seguridad, parques y jardines o una mejor atención a las personas sin hogar. También se manifestaron vecinos contra la planta de gas que se construirá en el Puerto por ser «perjudicial para la salud».
