“Necesitamos paz en Ucrania”, ha proclamado este jueves el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, durante la cumbre de los BRICS recién clausurada en la localidad rusa de Kazán. En el último día de esta reunión internacional, el alto diplomático ha vuelto a verse las caras con el presidente ruso Vladímir Putin, con quien no se reunía desde el abril de 2022. “Una paz justa, de acuerdo con la carta de la ONU, la ley internacional y la resolución de la Asamblea General y respetando los principios de soberanía, integridad territorial e independencia política”, ha enfatizado
El presidente ruso Vladímir Putin, como anfitrión, aprovechó el momento para dirigirse al mundo y avisar una vez más a Occidente y Estados Unidos, cree que Rusia no puede ser derrotada y aseveró que las esperanzas de que Rusia pierda la guerra con Ucrania son “cálculos ilusorios”. Una vez más recurrió a la historia para señalar que dichos cálculos, “están hechos por personas que no conocen la historia de Rusia”. El mandatario ruso tiene siempre muy presente la historia rusa para justificar algunas de sus políticas.
Este año la reunión de los BRICS se hizo por primera vez con la participación de los nuevos miembros: Irán, Emiratos Árabes Unidos, Etiopía y Egipto. El principal tema del evento fue la desdolarización de la economía mundial, algo que preocupa tanto a los miembros de los BRICS como a los países invitados, por su posible uso como “arma” por parte de EEUU cuando un país no goza de buenas relaciones con Washington. Para Rusia, además del aspecto económico era muy relevante ser sede de la reunión para mostrar al mundo que no está aislada y que cuenta con apoyo de otros países.
Aunque no se llegó a una conclusión sólida sobre como solventar el problema, sí se discutieron algunas medidas económicas como el fomento de la inversión entre los países miembros o la creación de un banco de cereales, entre otros. Uno de los problemas a los que se enfrenta actualmente Rusia es la expulsión del país del sistema Swift bancario, aunque el mismo Putin ha tenido que admitir este jueves que, “por lo que respecta al Swift y otras opciones, no estamos creando una alternativa”. Moscú ya creó el MIR, un sistema similar que únicamente usa Rusia. Según palabras del mandatario ruso, el grupo acordó algunos socios que se tendrían en cuenta para una posible ampliación. Algunos de los que lo han solicitado son Palestina, Bielorrusia y Laos, entre algunos otros.
Críticas a Guterres
La llegada de Guterres a Kazán para la cumbre de los BRICS ha sido criticada, especialmente desde Ucrania. Volodímir Zelenski, el presidente de este país, opinó desde Leópolis, cerca de la frontera con Polonia, que la asistencia del secretario general de la ONU a Kazán ayuda a “normalizar la invasión” y daña a la organización. Le recordó además que el día de las Naciones Unidas (que es este jueves 24 de octubre) se celebra “en todo el mundo” y no solo en esa ciudad rusa. Es la primera vez que Putin y el representante de las Naciones Unidas se ven en persona desde abril de 2022, después de la ofensiva sobre Mariúpol.
Uno de los portavoces de la organización, Farhan Haq, ha destacado que la cumbre “es de gran importancia para el trabajo de la ONU con los países miembros” de los BRICS, puntualizando a la vez que la posición sobre la guerra de Ucrania de Guterres es bien conocida»: una paz justa “justa basada en la carta fundacional de la ONU y las resoluciones». Oleksandr Merezhko, jefe de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento ucraniano, declarado a Efe que, según se deduce del resultado de la reunión., el foro de los BRICS “se posiciona como una organización que se centra en cuestiones económicas, mientras que Putin quiere convertirlo en una coalición antioccidental”.
Durante la cumbre, Putin se ha reunido con sus homólogos de China, India, Sudáfrica, Egipto, Venezuela, entre otros. Este jueves, Putin se ha reunido también con el presidente de Palestina, Mahmud Abbas, así como con el de Mauritania, Mohamed Ould Ghazouan, Bolivia, Luis Arce, Camboya, Thongloun Sisoulith.
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