«¡Canarias no se vende; se ama y se defiende!». Ese fue el grito más repetido en la manifestación celebrada en Las Américas (Adeje). El desfile alcanzó su culmen cuando tomó la playa de Troya. Se produjo allí el más significativo de los contrastes: los turistas que tomaban el sol en la arena, de una parte, y los asistentes a la marcha, de otra. «Basta ya», se leyó en unas letras gigantes en negro sobre fondo blanco mostradas en la orilla del mar.

Fuente