A Noruega no le sirvió de nada un gol de Alexander Sorloth, el segundo en cuatro días, ni la presencia de Erling Haaland para puntuar en su visita a la selección de Austria y Marko Arnautovic, decisivo con el golazo del 1-0 y seguro con el tanto de penalti del 2-1 con el que desató un triunfo apabullante después, con los testarazos de Phillip Lienhart, Stefan Posch y Michael Gregoritsch para el ruidoso 5-1 final.
La pegada del atacante del Inter, que sobrepasó en apenas 49 minutos la única diana que había marcado hasta ahora en esta campaña, lideró el triunfo y remarcó el tremendo equilibrio por la primera plaza en el grupo B3: Austria, Noruega y Eslovenia, ganadora este domingo en Kazajistán (0-1), suman los mismos siete puntos en la clasificación.
Austria fue mejor y más efectivo ya en el primer tiempo. En el minuto 5, Haaland estrelló su zurdazo desde el borde del área en el poste. Dos minutos después, en el 7, Marko Arnautovic, en un movimiento parecido en el otro área, soltó un derechazo inalcanzable para Nyland. Rebotó en el larguero y se alojó en la red de su portería. El segundo gol del curso del capitán austríaco, una de las figuras del duelo de este domingo.
Insistió después Haaland, sostuvo a Noruega alguna parada más de Nyland y acertó Sorloth. Mientras sus dudas son evidentes en el Atlético, con un gol solo en once partidos (en la primera jornada de LaLiga EA Sports española ante el Villarreal), fuera del once tipo actualmente de Diego Simeone, en Noruega suma dos tantos en dos encuentros este parón.
En el minuto 39, un centro de falta de Ryerson adentro del área lo aprovechó el atacante para remachar solo de cabeza, entre la falta de marcador y la media salida del portero Patrick Pentz, que se quedó en tierra de nadie, sin poder reaccionar al testarazo cómodo de Sorloth. Lo había intentado también antes sin tino, con dos disparos demasiado altos.
Ahí terminó la resistencia de Noruega, desbordada en la segunda parte. Un penalti cometido por Hanche-Olsen sobre Baumgartner lo transformó de nuevo Aranautovic, seguro, con la derecha, a su izquierda, sin opción para Nyland (2-1, m. 49).
La sentencia fue antes de la hora de juego, con un cabezazo perfecto de Lienhart. Su movimiento lo alejó del alcance de Nyland. La cara de decepción de Haaland fue significativa, sin gol este domingo, sin opción la segunda parte y apabullado después, con el 4-1 de Stefan Posch, el 5-1 de Gregoritsch y la sensación de que la goleada pudo ser mayor.