El alcalde de Carballo, Evencio Ferrero, y el concejal de Movilidad, Juan Seoane, mantuvieron una reunión con una quincena de comerciantes del entorno del puente de A Casilla, que les expresaron su preocupación por la incidencia que están teniendo en sus negocios las obras que está llevando a cabo Augas de Galicia en dicha estructura, que este mes quedó cortada también al tránsito peatonal.
Las obras que acomete Augas de Galicia por 1,8 millones para reducir el riesgo de inundación en las orillas del río Anllónsincluyen la construcción de un nuevo viaducto con dos carriles y aceras. Pero el cierre del paso peatonal y rodado en ese punto está pasando factura al comercio por la disminución de clientela.
La competencia municipal se limita a poner a disposición los terrenos y a la ordenación del tráfico, pero el alcalde ya se dirigió a Augas (también lo harán los comerciantes) para intentar que se adopten medidas.