Arranque de curso excepcional a pesar de que en la enfermería no dejan de agolparse los pacientes desde el primer día. El Hércules camina con seguridad, con aplomo de equipo grande en su regreso a la tercera categoría nacional. El recién ascendido se aclimata rápido a una nueva liga, tanto que ya es segundo, solo superado en la clasificación por un Real Murcia al que ya batió en el Rico Pérez que, en su tercer intento de volver al fútbol profesional, solo aventaja en un punto a los blanquiazules. En ese aspecto, nada que reprocharle al proyecto de Torrecilla.
A la bonanza deportiva le ha salido un lunar: el carrusel de lesiones que persigue al conjunto alicantino desde que la pelota echó a rodar. La mayoría de ellas en el lateral derecho, desgraciadamente en el único puesto que no está doblado en la plantilla. La baja inicial de Samu Vázquez ha provocado la reconversión de otras piezas de manera más o menos creativa a un desempeño táctico de suma especialidad.
Primero fue Alvarito Hernáiz, un atacante nato con condiciones físicas óptimas para combinar defensa y ataque quien ocupó el vacío dejado por el albaceteño. Cayó a las tres semanas y su testigo lo recogió Sotillos, que ha estado cinco desempeñando esa difícil tarea hasta que su muslo le dijo basta el viernes pasado, en Algeciras.
Las reconversiones, cuando son de este calado, obligan a esfuerzos y tensiones musculares mayores que los jugadores terminan pagando. Cuatro lesiones suman entre los tres que han ejercido como laterales en la parte derecha, dos de ellas de Alvarito, que en el Nuevo Mirador solo aguantó una hora sobre el césped. El cambio de Sotillos precipitó la vuelta del madrileño y, a continuación, la del extremo forzó la reaparición de Samu Vázquez, a quien Torrecilla deseaba mimar para no correr el riesgo de que recayera.
Sotillos y Alvarito se someten hoy al escrutinio médico para fijar la gravedad de sus dolencias musculares
El zaguero manchego acabó sin resentirse del hematoma que le ha tenido mes y medio fuera del equipo, pero al volver a ser el único aparentemente sano que puede asumir esa labor en flanco diestro es probable que deba forzar para formar de inicio en Yecla, una plaza que lleva a los futbolistas al límite físicamente por las condiciones de La Constitución y la propia forma de ejercer como local del equipo murciano.
El signo del destino muta de forma súbita. El curso pasado, con sobredosis de césped artificial, jugando en condiciones muy desfavorables, Samu lo jugó todo, no sufrió ni un percance. Como ahora, tampoco había sustituto natural para él dentro del vestuario, pero únicamente se perdió una fecha y fue por acumulación de amonestaciones. Frente al Yeclano será titular con la esperanza de que por fin se adueñe del puesto y no lo suelte.
El equipo no vuelve a Fontcalent hasta mañana martes, y tanto Alvarito como Sotillos aprovecharán el lunes de libranza para someterse al escrutinio médico que sirva para calibrar la verdadera gravedad de sus lesiones. Está previsto que Oriol Soldevila, con un esguince leve en el tobillo derecho, y Dani Romera, con rigidez en el abductor, además de un golpe en la pierna, retomen el trabajo con el grupo antes del desplazamiento a Yecla del domingo, la siguiente salida del Hércules tras la remontada de Algeciras de la semana pasada.