El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, defendió este viernes excluir de la selección nacional a los futbolistas que juegan en el extranjero porque, según él, «no hay ningún crack» en el exterior.
«Los que están fuera no son mejores que los que están aquí», afirmó durante una entrevista radiofónica, un día después de que la Canarinha ganase 1-2 a Chile en las eliminatorias del Mundial, con goles de Luiz Henrique e Igor Jesus, dos jugadores del Botafogo de Río de Janeiro.
El mandatario dijo que recientemente se reunió con el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) y que le planteó la posibilidad de convocar solo a quienes juegan en el país, lo que excluiría a futbolistas como Vinícius, Rodrigo, Militão y Endrick, del Real Madrid, o Raphinha, del Barça.
Según Lula, en este momento no hay «ningún Garrincha ni Romário» en equipos extranjeros; solo «un montón de jóvenes que aún no son cracks».
«En Brasil hay jugadores buenos y de la misma calidad (que los que están fuera), entonces den oportunidades a los que están aquí», propuso.
El presidente, que es seguidor del Corinthians de São Paulo, gusta de comentar la actualidad deportiva durante las entrevistas y últimamente se ha mostrado crítico con la situación tanto de su equipo, que está en la zona de descenso, como de la selección.
La Canarinha se impuso a Chile y respiró aliviada, después de una serie de derrotas en las eliminatorias del Mundial frente a rivales teóricamente más débiles, como Paraguay.