Durante la reciente exposición ADAS 2024, la empresa Israel Shipyards exhibió su corbeta multifunción Sa’ar S-80, una plataforma altamente versátil, concebida para adaptarse a las cambiantes demandas de las fuerzas navales.
Esta corbeta se suma a la lancha patrullera rápida Shaldag Mk. V, que ya ha sido entregada a la Armada de Filipinas como la embarcación de interdicción de ataque rápido de la clase Acero. El Sa’ar S-80 continúa siendo el elemento destacado dentro de la oferta de exportación de Israel Shipyards.
Según informaron los analistas de defensa de MaxDefense, el nuevo buque representa una solución efectiva para los incrementos en los requerimientos de la Armada de Filipinas, especialmente en el marco de los desafíos marítimos en la región.
El Sa’ar S-80 no solo se considera un activo naval, sino que se erige como una herramienta estratégica que podría facilitar a la Armada de Filipinas el abordaje de sus necesidades de seguridad marítima, especialmente en el contexto de las disputas territoriales que tienen lugar en el Mar de China Meridional.
La posibilidad de que el buque se configure como OPV lo convierte en una opción viable para los requisitos de buques de respuesta multifunción (MRRV) de la Guardia Costera de Filipinas, potenciando así el conocimiento del dominio marítimo y las capacidades de aplicación de la ley.
Israel Shipyards propone con el Sa’ar S-80 una solución que integra tecnología avanzada, ofreciendo la flexibilidad necesaria para adaptarse a distintos perfiles de misión.
Esta corbeta se deriva de la corbeta de clase Reshef de la Armada israelí, que a su vez representa una evolución del diseño previo S-72. Con una longitud de 80 metros, se presenta como una alternativa más compacta y económica a otras corbetas más grandes previamente adquiridas por la Armada filipina, como las de Hyundai Heavy Industries (HHI).
El Sa’ar S-80 proporciona flexibilidad para diversas funciones, con la capacidad de reconfigurarse como un buque de patrulla de alta mar (OPV), en función de las necesidades operativas del cliente.
Con dimensiones de 80 metros de longitud, 11 metros de manga y un calado de 3,25 metros, el buque desplaza aproximadamente 1.000 toneladas. Está propulsado por cuatro motores diésel organizados en una configuración CODAD (Combined Diesel and Diesel), lo que le permite alcanzar velocidades superiores a 28 nudos, con una velocidad de crucero de 14 nudos y un alcance de hasta 3.500 millas náuticas a 12 nudos.
La tripulación del Sa’ar S-80 está compuesta por 53 miembros, además de contar con espacio para 20 pasajeros adicionales. El buque incluye una cubierta de vuelo diseñada para operar helicópteros, aunque carece de un hangar.
Este buque también está dotado de dos sistemas de lanzamiento y recuperación (LARS) que permiten el despliegue y recuperación de RHIB (botes inflables de casco rígido), aumentando su versatilidad para múltiples operaciones marítimas.
Una característica esencial del Sa’ar S-80 es su sistema de armas modular, que posibilita la personalización conforme a los requerimientos del cliente. Israel Shipyards ha desarrollado este buque con la capacidad de integrar sistemas de combate de fabricación israelí o equivalentes de otros proveedores de defensa.
El armamento del buque puede incluir misiles tierra-tierra y tierra-aire, un cañón principal de 76 mm, cañones estabilizados controlados a distancia de hasta 30 mm y sistemas integrales de guerra electrónica.
En la configuración presentada en ADAS 2024, el Sa’ar S-80 contaba con un cañón principal de 76 mm, cuatro sistemas de lanzamiento vertical (VLS) de 4 celdas, probablemente para misiles tierra-aire Barak 8, así como dos lanzadores para municiones merodeadoras, capaces de llevar a cabo misiones antibuque y de ataque terrestre.
El diseño también contempla dos cañones secundarios, que probablemente sean sistemas Rafael Typhoon para cañones de 25 mm o 30 mm, y espacio suficiente para un helicóptero ligero o un UAV naval, además de dos RHIB.
En cuanto a su conjunto de sensores, el buque está equipado con un radar de matriz de barrido electrónico activo (AESA) para la búsqueda aérea y de superficie, un radar de control de tiro, un radar de navegación y sistemas destinados a gestionar las operaciones de helicópteros.
Un amplio sistema de guerra electrónica refuerza aún más las capacidades defensivas y ofensivas del Sa’ar S-80. Aunque el diseño actual no prioriza la guerra antisubmarina (ASW), puede ser adaptado para incorporar lanzadores de misiles antibuque de alcance medio y capacidades adicionales de ASW, si así se requiere.
Esta versatilidad posiciona al Sa’ar S-80 como un candidato apropiado para la Armada de Filipinas, que busca potenciar sus capacidades ante el incremento de tensiones en la región.
MaxDefense resalta la rentabilidad de plataformas como el Sa’ar S-80. Dado su potencial para igualar la efectividad de combate de buques más grandes a un costo considerablemente menor, esta corbeta podría convertirse en un activo estratégico para la Armada de Filipinas.
Además, su capacidad para la producción local se alinea con el programa de Postura de Defensa Autosuficiente (SRDP) del gobierno filipino, que busca fortalecer las capacidades de construcción naval nacional.
Con base en el apoyo previo de los Astilleros de Israel en la modernización naval de Filipinas, existe una alta probabilidad de transferencia de tecnología, lo que permitiría la construcción local de unidades Sa’ar S-80, reforzando así aún más la flota del país.
