La filtración de los exámenes de RTVE que obligó a suspender la convocatoria para más de 5.000 aspirantes ha removido los cimientos de la corporación. Pero esta circunstancia no era algo desconocido dentro del ente público, donde algunas voces llevaban años advirtiendo de las filtraciones que se habían producido en procesos anteriores. Una de las personas que dio la voz de alarma fue Roberto Lakidain, miembro del Consejo de Administración que desde que llegó al cargo hace tres años y medio ha alertado de esta situación en las más altas instancias, llegando a plantear la cuestión a los distintos presidentes que se han sucedido y elevando la advertencia tanto a la dirección de Recursos Humanos como a un tribunal examinador del que formó parte en 2021 y del que fue expulsado. Una actuación que ha llevado a que algunos le describan a nivel interno como «el azote de UGT«.
Lakidain fue nombrado en 2021 consejero de RTVE a propuesta de Unidas Podemos, pero ya era conocido desde años antes, durante la etapa de Gobierno de Mariano Rajoy, cuando fue expedientado en distintas ocasiones por sus denuncias de «manipulación informativa», según señalan fuentes próximas. Pese a su perfil progresista, Lakidain ha sido el centro de las críticas de UGT, el sindicato mayoritario ahora señalado por las filtraciones, que en su centro de trabajo, en la delegación de RTVE en Sevilla, llegó a colgar en el tablón sindical una hoja con el sello del sindicato donde cargaba contra el consejero. En aquella hoja apareció después un agujero en la cabeza que simula un tiro en la frente. La hoja lleva casi dos años colgada del tablón.
«En UGT le han montado mil campañas«, resumen fuentes de CCOO, sindicato del que Lakidain es afiliado. En aquella ocasión, el motivo estaba en el acuerdo al que había llegado el expresidente de RTVE José Manuel Pérez Tornero con los sindicatos UGT y SI a finales de 2021 para abrir 40 plazas en las delegaciones de Sevilla y Valencia y que, a su vez, supondrían el mismo número de bajas en Torrespaña, señalan fuentes conocedoras. Tras la dimisión de Tornero y la llegada a la presidencia de Elena Sánchez, el Consejo de Administración revocó el acuerdo, que algunos consideraban un «acto de clientelismo con puestos estratégicos para contentar a UGT».
Cartas denunciando filtraciones
Pero la fijación con Lakidain venía de antes, precisamente del último proceso de oposición interna a periodista de RTVE, entre 2021 y 2022, y al que se presentaron trabajadores para estabilizar la plaza. Lakidain fue elegido miembro del tribunal del examen por parte de Comisiones Obreras, segundo sindicato del ente.
Una vez que Lakidain entró al tribunal, se dedicó a denunciar las supuestas filtraciones que ya se habrían producido en la corporación, a tenor de los testimonios que fue recabando de trabajadores que decían haber recibido previamente los exámenes anteriores. El consejero lo elevó al área de Recursos Humanos en una carta, a la que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, que está fechada el 20 de noviembre de 2021, hace casi tres años, dirigida a Javier Hernández Ramos, director de organización y presupuestos de RTVE.
«Tras la publicación de mi participación en el proceso que nos ocupa», relata Lakidain en este documento, «distintos compañeros me han alertado sobre hechos ocurridos en anteriores procesos de selección de personal ocurridos en RTVE». «Afirman haber tenido acceso días antes de la celebración de la prueba a las preguntas del examen teórico (así afirman sucedió, al menos, en los procesos de los años 2004 y 2007)», advertía, pidiendo medidas para evitar que volviera a suceder. La misiva no se tradujo en ninguna acción.
Pero además de dirigirse a Recursos Humanos, lo expuso también el mismo 20 de noviembre ante el tribunal de RTVE para esas oposiciones internas, formado por diez miembros, de los cuales diez eran de la empresa (Paloma Jara Muñiz, Cristina Ónega Salcedo, Jaime Martín Valero, José Ángel Carpio García y Manuel Verdegay Flores) y otros cinco por parte de los sindicatos (Julián Pérez Olmos y Leticia García Martínez, por parte de UGT; María Teresa Frontiñan Legua (Sindicato SI), Jorge Pablo Igual Alonso (USO) y el propio Lakizain, de CCOO). En el acta de esa reunión, a la que ha tenido acceso este medio, se relata cómo Lakidain volvió a alertar sobre filtraciones ocurridas en convocatorias anteriores y propuso varios cambios para evitar que volviera a suceder.
En esa reunión, Lakidain expuso la necesidad de fijar medidas anti fraude al tener constancia «algunos comentarios que le han hecho distintos trabajadores sobre la falta de transparencia en las convocatorias de 2004 y 2007, mencionando que se filtraron las preguntas a los candidatos», recoge el documento. Ese día se reunía el tribunal para elaborar el examen, que tendría lugar por la tarde, y cada uno de los miembros del tribunal habían preparado previamente sus preguntas.
Denuncia y expulsión
Lakidain pidió que se desecharan esas cuestiones, al sospechar que podían haberse filtrado por alguna de las partes, y reclamó que la prueba se volviese a hacer de nuevo, a unas pocas horas de la celebración del examen. Además, pidió reducir el peso de los sindicatos en la prueba, y reclamó que «el número de preguntas que presente la parte social sea la mitad que las que sean presentadas por la parte de la dirección». Ninguna de sus propuestas fue considerada.
En la siguiente fase del examen, tras haber elevado sus denuncias, Lakidain fue expulsado del tribunal. Fue en la segunda parte del proceso, en las pruebas prácticas, en marzo de 2023. Los aspirantes estaban convocados por la mañana para una prueba de redacción y por la tarde había pruebas a cámara. Tres semanas antes, el consejero advirtió de que tendría que ausentarse algunas horas en la mañana, al coincidirle con una reunión. No hubo objeción, como relata él mismo en un acta posterior. Un día antes de la prueba envió un email a la secretaria del tribunal, de RRHH, para asegurarse. «Claro que podrías ausentarte una vez que los/as candidatos/as inicien la prueba prácti ca escrita de lamañana. Por la tarde, podrías incorporarte», fue la respuesta.
Pero los hechos no se correspondieron después. «A las 15h, conforme a los previsto y comunicado, acudí a las pruebas de tarde. En el mismo lugar de la prueba y sin haber recibido comunicación alguna durante la mañana, se me dice desde la dirección de recursos humanos y organización que no podría desarrollar mis funciones en dicho comité, que así lo habían acordado los miembros del comité», relata Lakidain en el acta donde se ratificó su expulsión, en una reunión del tribunal el 4 de abril de 2022. «En ese momento pregunto al comité devaloración y confirman dicha situación. En ese momento abandono la sala en la que se celebra la prueba».
«Enormes riesgos de filtraciones»
Lakidain ya era parte del Consejo de Administración, entonces presidido por el después dimitido José Manuel Pérez Tornero, y hasta esas altas instancias elevó la advertencia sobre las irregularidades que revestían el proceso. «Lo puse en conocimiento del Consejo de Administración y alerté de que las pruebas de acceso al empleo público había fisuras y falta de garantías que debían preocuparnos, además de enormes riesgos de filtraciones», relata Lakidain en declaraciones a este medio.
«En estos tres años no he hecho otra cosa. En no menos de diez ocasiones se ha trasladado a RRHH y a Consejo de Administración», abunda. Las advertencias se han producido en la cúpula de RTVE desde la presidencia de Tornero, pasando por la etapa de Elena Sánchez, y en los últimos meses, ya durante la Presidencia interina de Concepción Cascajosa.
«No es un episodio aislado», es una de las denuncias en la que coinciden estos días distintos sindicatos y trabajadores bien situados. El estallido de la filtración, creen, ha dado relevancia pública a un modus operandi que llevaría produciéndose años y que responde a un «clientelismo» instalado en la corporación, por el que señalan al sindicato mayoritario, UGT, de ganar apoyos a cambio de la promesa de favorecer a los trabajadores que no tienen plaza fija, el 42% de la plantilla, según desveló EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. «La mancha está extendida», relata otra fuente a este medio.
«Comprar la paz social»
La cifra de trabajadores sin plaza fija, señalan, se habría duplicado en los últimos cinco años, cuando sitúan la cifra de no fijos en el entorno del 20%. Desde entonces, la corporación ha fomentado los «procesos de desvinculación» de personal fijo, que se ha ido sustituyendo por nuevas contrataciones. «Entra mucha gente joven, vienen con la ilusión pero se encuentran con este pozo de corrupción donde aparecen ciertos sindicatos que garantizan el acceso a la plaza favoreciendo el clientelismo», denuncian.
Los dos miembros de UGT en el tribunal han sido señalados por el resto de sindicatos, más aún después de que rechazara firmar un documento donde se comprometía a asumir los gastos en caso de que sus delegados fueran los responsables de la filtración del examen. Durante la preparación de la prueba, como ha publicado EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, el sindicato también se opuso y logró tumbar una medida antifiltración que se acordó en un primer momento.
El sindicato CCOO ha presentado una denuncia ante la Policía Nacional ante la desconfianza que guardan hacia la que presentó RTVE el mismo día en que se suspendió el examen. Esta organización acusa al departamento de Recursos Humanos de ser «sospechoso» por lo sucedido, y le acusan de «consentir» el funcionamiento «clientelar» que achacan a UGT. «RRHH está absolutamente implicado en este proceso, lamentablemente», apuntan, atribuyendo esta «connivencia» a un único objetivo: «Comprar la paz social«.
Una paz social que, aseguran, «UGT les garantiza porque tiene mayoría en el Comité Intercentros -órgano de representación de los trabajadores-«. «¿Y por qué tienen mayoría? -continúan-. Porque van a elecciones dopados, con importantes afiliaciones de gente joven a la que prometen plazas y les filtran los exámenes».
«¿Por qué esto estalla ahora y no en 2004 o 2007?», se pregunta una voz vinculada a CCOO: «Porque esta vez habían prometido lo mismo a más de 1.000 compañeros en las elecciones sindicales. Y puedes jugar al camino de las filtraciones si son opsociiones internas, restringidas y con pocos asiprantes, pero en este caso eran cientos y cientos afiliados tu sindicato. Han tenido que abrir tanto la mano que han asumido unos riesgos que les ha acabado estallando».