Los colegios de Enfermería de las dos provincias canarias analizan la cifra de denuncias por agresiones interpuestas por los profesionales del gremio el pasado año en las Islas. Y es que el cómputo que manejan las agrupaciones colegiales no coincide con el que refleja el Observatorio Nacional del Consejo General de Enfermería (CGE). Hace unos días, el CGE reportó que en el Archipiélago se habían emitido 153 denuncias en el transcurso de 2023, un dato que difiere en gran medida del constado en 2022, cuando se registraron 11.
«El Consejo cuenta con una línea telefónica que permite a los enfermeros y enfermeras denunciar estas situaciones y nosotros disponemos de nuestros propios servicios. Entre los dos colegios canarios recibimos 13 denuncias, por lo que hemos solicitado información para aclarar la notable diferencia. De momento, no hemos obtenido respuesta», manifiesta Rita Mendoza, presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Las Palmas.
Tal y como indica la misma fuente, diez de las denuncias se emitieron en la provincia de Las Palmas y tres en la de Santa Cruz de Tenerife. «La mayoría de las afectadas siguen siendo mujeres, y el perfil predominante de agresores continúan conformándolo los varones», afirma. La mayor parte de estas situaciones se han producido en las puertas de entrada de los servicios de Urgencias de los hospitales y los centros de salud.
Tendencia al incremento
«Hemos apreciado una tendencia al incremento, pero sabemos que los casos que se producen son superiores a los que se declaran ante los colegios, las empresas y las Fuerzas de Seguridad. Además, las amenazas y las agresiones verbales se suelen pasar por alto, lo que nos parece un gran error», asevera Mendoza, quien espera que el CGE pueda aclarar la diferencia estadística en el menor tiempo posible.
Según asegura la responsable del citado colegio profesional, desde la institución se apuesta por la prevención y por dar herramientas a los colegiados para que puedan afrontar estos episodios. Por esta razón, se ha decidido impartir un taller de formación denominado Mediación y Consejos de Seguridad en Agresiones en el Ámbito Sanitario, una iniciativa que nació en septiembre y que puede presumir de una gran aceptación. «Gracias a esta acción, podemos incidir en tres áreas: la psicológica, la jurídica y la marcial, que se centra en ofrecer medidas de protección. El principal objetivo es potenciar la seguridad en el entorno laboral y que las enfermeras y enfermeros sean capaces de identificar las situaciones previas al conflicto», detalla.
Asimismo, Rita Mendoza recuerda que el colegio cuenta con un servicio de asesoría jurídica. «Dentro de nuestro Seguro de Responsabilidad Civil disponemos de otra línea de asesoría jurídica y de atención psicoemocional. Cuando nos enteramos de que se ha producido una agresión y, además, recibimos la denuncia, ofrecemos todo nuestro apoyo porque sabemos que son situaciones críticas», detalla.
Con el fin de sensibilizar al colectivo, el colegio organizará en noviembre una mesa de debate en la que participará una enfermera que ha sido víctima de algún tipo de agresión. La actividad servirá también para animar a los profesionales a denunciar estas vivencias.
Con base en las cifras difundidas por el Observatorio Nacional del CGE, en 2023 se produjeron 2.840 agresiones a enfermeras en el conjunto estatal, 260 más que en 2022. Andalucía vuelve a liderar la tabla con 752 casos –24 más que en 2022–. Le sigue Baleares, con 369 –108 más–; Aragón, con 242 –145 más–; Castilla y León, con 232 –85 menos–; Galicia, con 212 –24 menos–; Navarra, con 199 –28 más–; Murcia, con 165 –29 más–; Asturias, con 155 –56 más–; Canarias, con 153 –142 más–; Castilla-La Mancha, con 136 –12 más–; Cantabria, con 80 –72 más–; Cataluña, con 31 –13 más–; La Rioja, con 53 – 12 más–; Madrid, con 30 –cuatro menos–; la Comunidad Valenciana, con 15 –seis menos–; Extremadura, con 14 –13 más–; y Ceuta y Melilla, ambas con una demanda –dos menos para la primera y el primer caso que suma Melilla tras cinco años con el contador a cero. En el informe no figuran registros del País Vasco.
La pasada semana, el sindicato Satse denunció un nuevo caso de agresión a un enfermero. El suceso tuvo lugar en el servicio de Urgencias del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria y, en esta ocasión, la agresora fue una usuaria, que atentó física y verbalmente contra el sanitario.
Ya en febrero, el grupo sindical había denunciado que en 2023 se incrementaron un 75% los casos de agresiones al personal de enfermería del Servicio Canario de la Salud (SCS) tras contabilizar 153,67 más que el año anterior.
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