Más de 30 personas participaron ayer en la ruta guiada Santa Caterina Tomàs, la ciutat i la memòria, organizada por ARCA en el contexto de las celebraciones en torno al 450º aniversario de la muerte de la santa mallorquina.
En la ruta, guiada por el historiador del arte y experto en la figura de Santa Caterina, Gabriel Carrió i Vives, han podido disfrutar de las explicaciones a través de diversos lugares emblemáticos relacionados con Caterina Tomàs, como la plaza del Mercat, donde se ubica la piedra donde se cree que se sentó la santa mientras esperaba su confirmación para entrar en una orden religiosa, tal como había solicitado con vehemencia. O la calle Sant Bartomeu, donde se encuentra el domicilio de Elisabeth Zaforteza, mujer de la nobleza mallorquina a quien le unía una fuerte amistad.