Un preso fue asesinado en Ecuador por al menos otros cuatro reclusos en la cárcel de la sureña ciudad andina de Cuenca, según confirmó este jueves la Fiscalía, que formuló cargos contra los cuatro sospechosos de haber matado a su compañero de prisión.
El Ministerio Público detalló que el hecho ocurrió alrededor de las 18:00 hora local (23:00 GMT) del martes 1 de octubre, algo que públicamente no había sido confirmado por el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI), la agencia penitenciaria del Estado, pese a los requerimientos de los periodistas.
La víctima fue identificada como Jonathan P., de 29 años, que pertenecía presuntamente a la banda criminal Los Lobos y había llegado a mediados de junio a esta cárcel, procesado por delincuencia organizada, según detalló el comandante de la Policía José Vargas a la radio La Voz de Tomebamba.
Los presuntos autores del asesinato son Segundo Yonsin C., Josué Eduardo L., Emerson Alexander N. y Anderson Javier V., de nacionalidad venezolana; todos ellos recluidos en la cárcel de Turi, en Cuenca, a la que se le conoce oficialmente como Centro de Privación de Libertad (CPL) Azuay Número 1.
De acuerdo a la Fiscalía, los sospechosos entraron con armas blancas a la celda 23 del Centro de Detención Provisional y apuñalaron a la víctima hasta matarla. Según Vargas, que calificó el hecho como un incidente aislado, lo hicieron con un arma blanca artesanal.
En el momento de los hechos, Fiscalía señaló que personal de las Fuerzas Armas escuchó gritos de auxilio y al llegar al lugar observaron a Segundo Yonsin C. y Josué Eduardo L. cuando arrojaban dos armas blancas al suelo, motivo por el que fueron detenidos en el acto. Tras las investigaciones, se determinó que Emerson Alexander N. y Anderson Javier V. también habrían participado en el hecho. Los cuatro tenían manchas de sangre en sus manos y prendas de vestir.
La fiscal de turno inició el proceso penal con base en las versiones de testigos presenciales y de los militares, el informe de reconocimiento del lugar de los hechos, el informe preliminar de autopsia, entre otros elementos de convicción. Así, solicitó la medida de prisión preventiva contra los cuatro imputados.
Entre 2021 y 2023 fueron asesinados más de 500 presos en las cárceles de Ecuador, la mayoría en una serie de masacres por enfrentamientos entre bandas criminales rivales.
Desde 2024 la violencia entre grupos criminales ha descendido producto de la militarización de las prisiones ordenada por el presidente, Daniel Noboa, cuando a inicios de año elevó la lucha contra el crimen organizado a la categoría de «conflicto armado interno». De esta forma los militares y policías arrebataron el control interno de los centros carcelarios a las bandas criminales, en un proceso no exento de denuncias de presuntas violaciones a los derechos humanos, lo que incluye incluso una crisis de abastecimiento de alimentos en las cárceles.