El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha condenado «sin ambajes» el ataque con misiles de Irán a Israel y ha advertido de que se trata de un «nuevo paso hacia una guerra regional total».

Albares se ha mostrado «muy preocupado» ante la situación de «extrema gravedad» en Oriente Próximo, por lo que ha insistido en un llamamiento a todos los actores implicados a la contención, la no escalada y la responsabilidad reivindicando nuevamente la solución de los dos Estados para acabar con el conflicto.

«España estaba haciendo todo lo que estaba en su mano para que no ocurriera lo que está ocurriendo y es la extensión de la guerra a Líbano. Hemos visto una incursión israelí en Líbano, que es un Estado soberano, y el lanzamiento de cohetes desde Irán a Israel, que nosotros condenamos sin ambajes. Es un nuevo paso hacia una guerra regional total», ha lamentado en declaraciones a la Cadena Ser.

Albares ha sostenido que la comunidad internacional está llamada a ser «muy consciente» de la extrema gravedad del conflicto que, ha reiterado, está «cambiando de naturaleza» e involucrando a cada vez más países. «Todos deben de hacer un esfuerzo a la contención y a la desescalada», ha dicho.


«El Gobierno de España condena el ataque de Irán contra Israel y pide que esta espiral de violencia termine ya. Para alcanzar la paz, es imprescindible un alto el fuego en Gaza y en Líbano, y que se respeten el derecho internacional y el derecho internacional humanitario», ha sostenido, por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su cuenta de Twitter.

«Alto al fuego inmediato»

En la misma línea, en otra entrevista en RNE, el ministro ha reivindicado la necesidad de un «alto el fuego en Gaza inmediato, una tregua en Líbano inmediata, y que se abra camino esa conferencia de paz por la que España lleva trabajando tantos meses».

En este sentido, ha recordado que la semana pasada se reunió por primera vez con su homólogo iraní y le pidió «contención» para su país y para su gobierno así como para aquellos grupos afines como Hezbolá. «El conflicto está mutando de una forma muy peligrosa a una extensión claramante regional», ha alertado.

Israel ha vivido este martes el segundo gran ataque directo por parte de Irán en cuestión de meses, un bombardeo masivo con misiles que la Guardia Revolucionaria iraní ha justificado como una venganza por el asesinato en julio en Teherán del entonces líder de Hamás, Ismail Haniye, y la muerte el pasado viernes en Beirut del máximo jefe de Hezbolá, Hasán Nasralá.

Irán cumple su amenaza con un ataque masivo con misiles sobre Israel para vengar a Nasralá y Haniye

Israel ha vivido este martes el segundo gran ataque directo por parte de Irán en cuestión de meses, un bombardeo masivo con misiles que la Guardia Revolucionaria iraní ha justificado como una venganza por el asesinato en julio en Teherán del entonces líder de Hamás, Ismail Haniye, y la muerte el pasado viernes en Beirut del máximo jefe de Hezbolá, Hasán Nasralá.

Ya desde la muerte de Haniye, las principales autoridades iraníes venían advirtiendo de que se reservaban el derecho a responder. No en vano, a mediados de abril la Guardia Revolucionaria ya acometió otro ataque con misiles y drones como represalia por un bombardeo israelí sobre el consulado iraní de Damasco.

La posibilidad de una réplica de este ataque estaba por tanto sobre la mesa pero no ha sido hasta este martes cuando los acontecimientos se han acelerado, en cuestión de horas. El Gobierno de Estados Unidos fue el primero en dar la voz de alarma ante un ataque «inminente» y, menos de tres horas después, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que ya había comenzado.

Las alertas se activaron entonces en todo Israel, con un llamamiento expreso para que la población acudiese a los refugios ante la inminente llegada de proyectiles. En la hora posterior, en los cielos de las principales ciudades se hicieron visibles esos misiles, parte de los cuales han sido derribados por la Cúpula de Hierro, el sistema de defensa antiaéreo israelí.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, también ha dado orden a sus Fuerzas Armadas de colaborar en estos derribos, según la Casa Blanca, mientras en toda la región se extremaban las precauciones ante posibles efectos colaterales. Jordania e Irak han ordenado el cierre de sus respectivos espacios aéreos, al igual que en Israel también han quedado paralizados todos los aterrizajes y despegues.

El portavoz de las FDI, Daniel Hagari, ha explicado en una primer mensaje tras dar por concluida la amenaza que no tienen constancia de daños personales y el servicio de ambulancias Magen David Adom sólo le constan heridos leves, atribuidos al impacto de metralla o a caídas mientras la población se dirigía de manera apresurada a los refugios para protegerse.

boton whatsapp 600



Fuente