La confianza del consumidor de EEUU se ha elevado en septiembre hasta su lectura más alta desde mayo de 2024 y aumenta por segundo mes consecutivo, según la Encuesta de Consumidores de la Universidad de Michigan.
Así, el índice de confianza del consumidor se ha situado en 70,1 puntos, frente a los 67,9 de agosto y por encima de los 67,8 de septiembre pasado. El índice actual, por su parte, se ha elevado a 63,3 unidades, mejorando los 61,3 del mes anterior, pero por debajo del 71,1 de septiembre de 2023. El índice de expectativas también ha mejorado a 74,4 puntos, desde los 72,1 de agosto.
«El índice de expectativas para septiembre es ahora un 13% superior al de hace un año y refleja un mayor optimismo en una amplia franja de la población. Si bien la confianza se mantiene por debajo de su promedio histórico en parte debido a la frustración por los altos precios, los consumidores son plenamente conscientes de que la inflación ha seguido desacelerándose«, ha dicho la economista de la UM Joanne Hsu, directora de las encuestas.
En este sentido, y aunque los precios altos siguen siendo el factor más comúnmente citado que influye en las finanzas personales de los consumidores, estos «reconocen plenamente» que la inflación se ha suavizado en los últimos dos años. Asimismo, la confianza parece estar cobrando impulso a medida que las expectativas de los consumidores sobre la economía mejoran.
«Si bien hay algunas señales de que los consumidores perciben un ligero deterioro en las condiciones del mercado laboral, no esperan efectos sustanciales en la economía», ha afirmado Hsu. «Los consumidores reconocen que los mercados laborales han sido relativamente fuertes y esperan que la Fed intervenga para evitar que las tasas de desempleo se salgan de control», ha añadido.
Las perspectivas económicas a un año vista han aumentado durante cuatro meses consecutivos, y las ganancias de septiembre se han reflejado en todos los grupos de edad, ingresos y educación. Hace un año, más de la mitad de los consumidores esperaban malos tiempos para la economía en el próximo año; ahora, esa proporción es del 28%.
De cara a los próximos 5-10 años, las expectativas de los consumidores sobre la economía también han aumentado a largo plazo, alcanzando su nivel más alto desde abril de 2024 y subiendo un 4% por encima de su media histórica. Las expectativas de desempleo también se han vuelto más favorables en septiembre, con una proporción cada vez mayor que espera que el desempleo general disminuya durante el próximo año.
«De hecho, las expectativas de los consumidores para la economía han ido en aumento, ya que esperan que las tasas de interés continúen cayendo en el próximo año«, ha concluido Hsu.
