Joan Peñarroya afronta su primera temporada al frente del Barça de basket. Le llega la oportunidad a sus 55 años, tras más de 15 años en los banquillos de baloncesto. Lejos quedan ya aquellas primeras experiencias en Olesa, o Navàs.
Tras algo más de un mes trabajando con el equipo, el nuevo técnico azulgrana atiende a SPORT para repasar sus primeras semanas en el cargo, hablar de los objetivos de la temporada, y como ve el nivel tanto de la Liga Endesa como de la Euroliga.
En este adelanto de la entrevista que SPORT publicará de manera íntegra este próximo sábado 28 de septiembre, Peñarroya también se moja sobre cómo han sido los primeros días de convivencia de Willy Hernangómez, ‘protagonista’ estos últimos días por las declaraciones de Pablo Laso tras un incidente vivido con Roger Grimau el curso pasado.
¿Qué destacas del vestuario en este primer mes en el que les has ido conociendo?
Me he encontrado un vestuario de jugadores que ya vienen de las temporadas anteriores, un núcleo importante llamado a seguir siendo muy relevantes. Hemos incorporado cinco jugadores en cinco posiciones casi podríamos decir diferentes aunque con sus polivalencias. Tienen todos mucha ilusión y han venido con la energía y la ambición para hacer una buena temporada. A partir de ahí, como pasa ahora en nuestro baloncesto, hay que acoplarse, hay mentalidades diferentes, baloncestos distintos, ya que alguno ni ha jugado en Europa. Estamos en un momento de construcción, pero lo más importante es que la voluntad de los jugadores, tanto en el trabajo, en el esfuerzo, como en la ilusión, está siendo muy buena.
Se ha hablado mucho estos días de Willy Hernangomez, las declaraciones de Laso sobre un incidente con Grimau. ¿Qué puedes decir de tu relación con él estas primeras semanas de convivencia?
Es un jugador más. Yo intento no hacer distinciones entre los jugadores, dándoles la importancia que tiene cada uno de ellos, intentando encontrar espacio para cada uno de ellos. Y Willy está perfecto, no esperaba otra cosa. Está trabajando muy bien, con muchas ganas. Está impecable en todo lo que se le pide, y hasta el momento, su actitud es irreprochable. Además, lo veo con ganas, no sé si la palabra es resarcirse, pero de hacer una buena temporada.
Has pedido cierta calma con los fichajes tras una pretemporada en la que parece que se ha dado con la tecla. ¿Qué papel tiene el entrenador en esa integración al equipo?
Tengo mi responsabilidad en cuanto al juego, asignación de roles, que eso ayuda mucho a que luego los jugadores se sientan más a gusto. Hemos de tener paciencia con todos porque es un equipo muy nuevo, que se está conociendo, con un entrenador nuevo y con ideas nuevas. Hay algunas que, evidentemente, van a ser muy similares a las de la anterior etapa. Estamos contentos con las incorporaciones que hemos hecho, son perfiles que buscábamos, y a partir de ahí, lo que dicta para todos siempre es la competición. Empezó el fin de semana pasado, pero realmente el día a día o la normalidad de la competición empieza ahora, entonces vamos a ver cómo nos asentamos en este doble gran reto que es compaginar Euroliga y ACB.
¿Qué crees que necesitaría hacer el equipo, para que tú a final de campaña, dijeses que la temporada ha sido buena?
Mi trabajo ahora es intentar que estos jugadores jueguen como equipo y sacar el mejor baloncesto posible de las grandes calidades que tienen individualmente, pero que sean grupales. Mi mayor reto siempre en todos los sitios es que nuestra afición esté contenta con lo que ve. Si puede ser, al margen de ganar o perder, salga contenta y orgullosa de su equipo. Y para eso, hay que transmitir, hay que tener un sello, meter unos valores que espero que el equipo sea capaz de transmitir. Y a partir de ahí, pues sí, claro, evidentemente yo quiero ganar. Quiero ganar, todos los jugadores y todos los técnicos que estamos aquí estamos para ganar. Pero será más fácil llegar a ese objetivo final si primero hacemos todo lo anterior que te he comentado.