La intertextualidad es a Pedro Almodóvar lo que la tinta a los libros. Si el cine del manchego se considera trascendente no es por la fama alcanzada en el extranjero o por la pila de premios que debe almacenar en casa, sino porque su obra va más allá de un contenido de entretenimiento para ofrecernos un discurso donde la voz del autor pasa a ser también parte del relato. Las referencias a otros autores y autoras están tan claras que dos de ellas, Cristina García Rodero y Louise Bourgeois, tienen su primer plano en una de las primeras imágenes que trascendieron de su próximo estreno, ‘La habitación de al lado’. Todas las películas de Almodóvar hablan entre sí, conectan y se relacionan de una forma u otra. ‘Dolor y gloria’ sostiene el relato de autoficción de manera significativa; es claramente autobiográfica. Y si su filmografía es también biografía, esta se ve reflejada en muchas de sus ficciones… aunque estas no tengan, aparentemente, nada que ver.
Películas que aparecen “dentro” de otras hasta incluso años antes de su estreno, como ocurre con ‘Volver’, estrenada en 2006. Su primera aparición fue muchos años antes en forma de guion descartado en ‘La flor de mi secreto’ (1995).
Marisa Paredes en «La flor de mi secreto» / –
Leo Macías (interpretada por Marisa Paredes) es una escritora de novela rosa de éxito. Sin embargo, debido a problemas con su marido, sus novelas parecen haberse tornado oscuras y más tenebrosas de lo que la editorial espera, ideas que no son aceptadas por el sello al no considerarlas buenas o lo suficientemente comerciales. Uno de los borradores que presenta trata sobre una mujer que esconde el cadáver de su marido en una cámara frigorífica después de que su hija le matara tras un intento de violación por parte de este. Cualquiera que haya visto ‘Volver’ y vea más tarde la, años antes estrenada ‘La flor de mi secreto’, pensará automáticamente en Raimunda. Una autorreferencia a una futura película que sólo Almodóvar habría sido capaz de hilar.
Imagen de «Volver» / –
Otra autorreferencia clara la hallamos en ‘Los abrazos rotos’ (2009) donde aparece el cartel de una película que Almodóvar estrenaría doce años más tarde con el mismo título: ‘Madres paralelas’ (2021).
Cartel de ‘Madres paralelas’ en ‘Los abrazos rotos’ / –
En ‘Los abrazos rotos’ Lluís Homar interpreta a Harry Caine, guionista invidente que en la película “convive” con dos identidades: la “primera”, Mateo Blanco, es director de cine y en su despacho luce el cartel de una película suya titulada ‘Madres paralelas’. Blanco también aparece firmando el guion de ‘Madres paralelas’ en este filme. En la secuencia que muestra el cartel enmarcado se observa un nido con dos dados, que representarían el amor y la suerte, un leitmotiv constante en la filmografía de Pedro Almodóvar que no sólo estrecha un lazo entre ‘Los abrazos rotos’ y ‘Madres paralelas’ sino que está presente en todos sus filmes de una forma u otra (sobre todo en ‘Dolor y gloria’).
Imagen del guion de ‘Madres paralelas’ en ‘Los abrazos rotos’. / –
‘Cuál es tu tormento’, el luto y el infierno
El próximo 18 de octubre se estrena ‘La habitación de al lado’, aclamada en Venecia y basada en la novela de Sigrid Nunez ‘Cuál es tu tormento’. Se trata del primer rodaje íntegramente en inglés del director y está protagonizada por Tilda Swinton y Julianne Moore. De nuevo la autoficción vuelve a formar parte de la vida autoral de Almodóvar de forma indirecta, esta vez debido a la obra que adapta a la gran pantalla.
En ‘La habitación de al lado’ una de las protagonistas, novelista de autoficción, se reencuentra con una de las mejores amigas de la juventud en una situación especialmente dolorosa.
En el cine de Almodóvar el tema de la obra y la persecución de la voz poética son una constante. Es habitual que exista un personaje creador, que coexista a su vez con los personajes que le inspiran y su vida se entrelace con las historias que, como es el caso de los ejemplos de ‘Los abrazos rotos’ con ‘Madres paralelas’ y ‘Volver’ con ‘La flor de mi secreto’, conforman una red intertextual que se va enriqueciendo con cada una de sus películas.
Tilda Swinton y Julianne Moore encarnando a Martha e Ingrid en ‘La habitación de al lado’. / / WARNER
Y es que, si en cada una de sus obras existen múltiples referencias literarias o cinematográficas también de otros autores (un ejemplo claro el paralelismo entre ‘Todo sobre mi madre’ con ‘All about Eve’, dirigida por Joseph L. Mankiewicz), su último filme no ha dejado esta buena costumbre atrás. Son pocas las imágenes que han trascendido de ‘La habitación de al lado’ pero en una de ellas se puede observar a Tilda Swinton y Julianne Moore cara cara en un sofá: sobre ellas, una fotografía de Cristina García Rodero, que retrata a un grupo de mujeres marchando por las calles durante el Sábado Santo del 2000 en Ampulia, Italia. Estas dolientes parecen reflejar la escena y conforman, a su vez, un homenaje más que el director presta a las mujeres mediterráneas, sus vidas, historia y sororidad. No es la única referencia: A la izquierda se observa una obra de Louise Bourgeois con los versos «I have been to hell and back / and let me tell you it was wonderfull» («He estado en el infierno, he vuelto / y déjame decirte que es maravilloso»). Habrá que esperar a octubre para saber qué significa.
