La Universidad de Zaragoza está de celebración. La institución pública acumula 550 años de historia, que comenzaron en 1474 y que llegan hasta el día de hoy. En homenaje a este recorrido, el Vicerrectorado de Cultura y Proyección Social estrena este martes a las 19.00 horas la exposición ‘La Universidad de Zaragoza, 550 años de historia’, que ha elaborado en colaboración con el Gobierno de Aragón, el Ayuntamiento de Zaragoza y la Fundación Ibercaja. El objetivo de la misma es, como ha explicado María García Soria, coordinadora de exposiciones, «no solo contar la historia de la institución, sino también todas esas cosas que pasaron alrededor de ella y que afectaron a la universidad». La muestra se podrá visitar hasta el 11 de enero de 2025 en el Paraninfo de Zaragoza.
Y, ¿qué se podrá ver en ella? La exposición está dividida en dos salas, la Saura y la Goya, que están conformadas con obras de documentación y bienes históricos obtenidos de la Universidad de Zaragoza y de otras instituciones públicas y privadas como el Arzobispado de Tarazona. A lo largo de toda la muestra hay «guiños» al papel universitario que ejercieron las mujeres en la capital aragonesa. Así, se menciona a algunas como María Moliner, Ángela García de la Puerta o Amparo Poch.
La sala Saura tiene como eje principal varias piezas. Una de ellas es la bula del papa Sixto IV, que permitió que en 1474 se pudiera elevar el antiguo estudio de la ciudad a Estudio General de Artes. El centro lo ocupan dos piezas de la época, en las que se ve a Juan II y a su hijo, Fernando el Católico. Es gracias a este último, y a que políticamente hay más interés político por Aragón que por Cataluña, que «se favorece a la ciudad de Zaragoza», cuenta García.
A los puntos centrales se suman otras piezas de gran valor histórico para la historia de la institución como el protocolo notorial del archivo de Aragón. Son también muchos los rostros conocidos que se pueden ver a lo largo de la exposición, entre los que está el de Pedro Cerbuna, quien dio tanto el empuje político como la dotación económica a la universidad.
De la Ilustración a la actualidad
Superadas las dos primeras ‘estancias’, que muestran la fundación y la consolidación (1541 a 1650) de la institución, se llega a la sala Goya. Distribuida de forma cronológicamente, comienza por la etapa de la Ilustración y llega hasta la actualidad. Así, ilustra el nacimiento de los primeros gabinetes, las labores de Ramón Pignatelli y de profesores como Jordán de Aso, los inicios del Colegio Mayor Pedro Cerbuna, entonces situado en el paseo de Ruiseñores, o la reconstrucción de la universidad.
Y no se olvidan del papel universitario de las mujeres, cuyo trabajo se pone en valor al mostrar piezas como el libro ‘Educación Física y Moral de las Mujeres’, de Josefa Amor y Borbón. Aunque en la exposición se muestran tanto los destrozos de los Sitios como de la Guerra Civil, García explica que son «menciones y no mucho más» porque querían contar una «historia positiva».
Pero si hay una clave en la sala Goya del Paraninfo es el Atlas de Santiago Ramón y Cajal. Ubicada en una gran vitrina, es la pieza principal de la exposición. Formado por 49 láminas, las 12 primeras de Ramón y Cajal y las otras 37 de otros autores, llama la atención por su gran tamaño. En ellas se ven imágenes de anatomía patológica.
‘La Universidad de Zaragoza, 550 años de historia’ finaliza en la etapa democrática del campus público aragonés, que se inició en 1978 y que llega hasta hoy. Ella se refleja con imágenes en las que se pide «libertad», con la creación de los campus de Huesca y de Teruel o con el gran panel en el que se refleja la internacionalidad que hoy caracteriza a la institución. Y así, con muchos más detalles y claves del legado universitario, se recorren los más de 500 años que la Universidad de Zaragoza acumula en su historia.