El FC Barcelona recuperó a un soldado para la dura batalla que está significando esta temporada en La Cerámica. Pablo Torre había sido un espectador de lujo hsta la fecha desde el banquillo, pero en su primera titularidad se reivindicó. Y de qué manera.
El cántabro intervino desde el arranque cuando sacó una amarilla sobre Dani Parejo en un regate en la zona de tres cuartos. Su objetivo fue encontrar el hueco entre Comesaña y el propio Parejo, el doble pivote del Villarreal, para romper desde esta posición.
Pedri se situó cerca de Eric Garcia, mientras que Torre fue el avanzado. En esta línea era difícil encontrarlo libre de marcaje, pero el joven futbolista tuvo paciencia. Fue basculando a la espera de recoger un balón con el que hacer daño.
Su temple tuvo premio. Pablo supo encontrar su espacio para filtrar un balón de oro a Robert Lewandowski y el polaco definió a la perfección por el primer palo. El primer abrazo del ariete fue para el pasador, consciente de que su compañero necesitaba ganar en confianza por la falta de oportunidades hasta la fecha.
Pablo Torre solo había disputado hasta la fecha 14 minutos, 7 frente al Valladolid en la Liga y otros 7 ante el Mónaco en la Champions League. La irrupción de Olmo lo había dejado sin espacio en la posición de centrocampista más avanzado y, en caso de duda, Flick buscaba más equilibrio con un interior de lucha como Marc Casadó.
Nuevo escenario
Con la lesión de Olmo se abrió un escenario para Pablo Torre. En el primer encuentro ausente del egarense en Mónaco, Flick optó por la opción de Pedri, con Casadó y Eric por detrás suyo. Una prueba que resultó fallida ya que a los diez minutos cambió todo al quedarse el equipo con solo diez jugadores.
De todos modos, Pablo Torre tuvo minutos en el Principado y el alemán ya dejó entrever sus intenciones para los siguientes encuentros. El ex del Racing de Santander fue titular en La Cerámica, con Pedri desde atrás ayudando a Eric García en la zona más próxima al círculo central.
El equipo se fue al descanso con ventaja, gracias en parte a la asistencia de Torres, aunque tocado anímicamente por la lesión de Ter Stegen. Era el momento de volver a dar un paso adelante. A Pablo Torre le costó entrar en juego en la reanudación y tuvo un par de pérdidas peligrosas.
Gol decisivo
No obstante, el cántabro se levantó y tuvo otra de sus apariciones mágicas. Pablo Torre volvió a revolverse en el límite del área para empalmar un zurdazo que, tras tocar ligeramente en Bailly se coló en el ángulo de Diego Conde.
Fue su primer gol con el Barça en la Liga. Hasta ahora solo había logrado un tanto en su estreno con el Barça, en la campaña 2022-23, en la Champions League en el partido frente al Viktoria Plzen para cerrar la temporada.
Pablo Torre fue providencial. El equipo requería de ese gol para ganar en serenidad. El Villarreal había salido en tromba para remontar el marcador y se encontraba con un 1-3 en contra ante el que ya poco pudo hacer.
Con el trabajo hecho y mucho desgaste después de la larga inactividad, Flick le dio descanso y fue el momento para contener con Marc Casadó. Pablo Torre demostró que es un jugador de nivel para jugar en este Barça y fue una de las mejores noticias de la tarde, más allá del resultado, por la grave lesión de Ter Stegen.