La Fira Arrels abrió sus puertas el pasado sábado, con un programa cargado de actividades y con la entrega de los Premis Gastronòmics, que otorga anualmente desde el 2011 la Associació de Periodistes i Escriptors Gastronòmics de les Illes Balears.
Como ya anunció la entidad hace unos meses, en Mallorca, el premio de la Crítica Gastronòmica recayó en el cocinero Bernabé Caravotta, por su trayectoria, concepto culinario y emprendimiento, mientras que el de producto (denominado Caty Juan de Corral) ha sido para la Gelateria Can Miquel. Para Ibiza i Formentera, el galardón de la crítica se entregó a Herbes Marí Mayans, mientras que el Premi Joan Castelló i Josepa Orvay se concedió a la a Virgínia Marí, a título póstumo, por su contribución en la divulgación de recetas tradicionales con pescado.
En cuanto a Menorca, los premios han sido los siguientes: Cuiner de l’any: Sergi Villalonga (Cafè Balear de Ciutadella); Restaurant revelació: Vermell, de l’hotel rural Vestige Son Vell; Reboster/Pastisser de l’any: Juan Carlos García, gelaterde La Fàbrica de Farry; Millor cap de sala: Víctor Torrent Vivó, del Restaurant Pinzell; Trajectòria professional: El Paladar, amb botigues a Menorca, Mallorca i Evissa; Promoció del producte local: Vicent Vila, cuiner jubilat; Millor gastrobar: Calucha; Millor restaurant de cuina menorquina, Premi Ramon Cavaller: Sa Fonda (Fornells).
Se pudieron degustar una gran cantidad de productos. | B. FONT
La cita, organizada por el Consell de Menorca, se celebró hasta ayer domingo en el recinto ferial de es Mercadal y también ha contado con una área dedicada a la restauración, a cargo de la escuela-restaurante Ca n’Aguedet. Tanto para el sábado como para el domingo, se organizaron demostraciones de cocina en directo y degustaciones de producto. Así, los menorquines Josep Maria Borras, Irene Gordillo y Pau Sintes (entre otros), compartieron protagonismo con los mallorquines Miquel Calent, Catalina Pons y Andreu Benítez.
En cuanto a los productores de Mallorca, Licors Moyà y Licors Dos Perellons han compartido protagonismo con artesanos menorquines, como los productos ecológicos Es Capell de Ferro (carne, conservas, embutidos, frutas, hortalizas y huevos), la finca La Marcona (dedicada al cultivo de trigo y su transformación en harina, pan y bases de pizza), los embutidos Alcotx o las bodegas Torralba i Torralbenc, entre otros.
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