Ceylin Erguvan nos conquistó desde el primer momento. Cuando
todo comenzó, conocimos a una Ceylin alocada que acababa de empezar su carrera
como abogada. Era imprudente, rebelde, impulsiva y no le importaba saltarse las
reglas con tal de ganar los casos o conseguir su objetivo.
El asesinato de su hermana
Uno de los acontecimientos que cambió su vida para siempre
fue el asesinato de su hermana Inci.
Este trágico suceso cambió su vida para siempre sumiéndola
en el más profundo dolor. A partir de ese momento, la búsqueda del asesino se
convirtió en su principal objetivo en la vida lo que le llevó a desafiar
constantemente a la ley y a la justicia.
Ilgaz, su punto débil
En este duro camino, conoció a Ilgaz, quien también
trabajaba con ella en el mismo caso, pero como fiscal. Al principio, chocaba
mucho con él ya que sus diferencias eran más que evidentes. Él no se saltaba
ninguna regla y ella todas.
Aunque al principio su vínculo era estrictamente profesional,
poco a poco la abogada se dio cuenta que no podía vivir sin el fiscal Kaya.
Los miedos, celos y malentendidos no tardaron en aparecer;
pero su relación se hizo más fuerte. Ceylin empezó a tomarse su profesión de
otra manera con el gran Ilgaz Kaya a su lado.
La desaparición de su hija
El mundo de Ceylin de derrumbó totalmente cuando Mercan, la
hija que tuvo con Ilga, despareció sin dejar rastro.
La abogada experimentó el dolor más grande que una madre puede
soportar, como es perder a un hijo, y cambió radicalmente. Cambió de look, de
estilo, mucho más oscuro y serio, y sus facciones se hicieron más duras.
Su relación con Ilgaz se rompió porque tenían distintos
puntos de vista entorno a la desaparición de si hija y… ¡se convirtió en
fiscal! Su único objetivo era llevar el caso de su pequeña y no iba a parar
hasta conseguirlo.
Justicia y corazón, el equilibrio perfecto
Afortunadamente, Ceylin e Ilgaz consiguieron recuperar a su
hija y volvieron a estar juntos. Fue un camino difícil y, sobre todo, recuperar
el cariño de Mercan. Poco a poco su amor se fue consolidando y ahora es más
fuerte que nunca.
Ceylin ha aprendido que no todo es blanco o negro y que, a
veces es bueno encontrar un equilibrio entre lo que dicta la ley y lo que dicta
el corazón. Como siempre ha dicho Eren, Ceylin es una Reina y lo será siempre.