El líder de Junts, Carles Puigdemont, ha vuelto a lanzar una amenaza al Gobierno mientras una delegación socialista se ha desplazado a Suiza para intentar convencer al dirigente independentista de que apruebe los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE). 

«Nuestra vocación política no es dar estabilidad ni desgastar a nadie. Nuestro objetivo es defender Cataluña y los intereses de los catalanes, y quien nos ayude tendrá nuestro apoyo, sea para gobernar, sea para hacer oposición», ha escrito Puigdemont en la red social X. 

Su mensaje era una respuesta a una información de la agencia Europa Press en la que mantiene que «Feijóo se abre a negociar con Junts y PNV para desgastar al Gobierno», después de que el partido catalán «haya adelantado votar en contra del techo de gasto».

Puigdemont, por tanto, sigue manteniendo la presión sobre el Gobierno pero también evita hacer guiños al PP. «Quien nos engañe (o maree la perdiz), que no cuente [con nosotros]», advierte. 

Según el líder independentista, a su partido no le interesan los «bloques ideológicos» ni «las rivalidades domésticas que mantienen los partidos españoles». «No nos interesa formar parte de ninguna de las dos cosas», advierte. 

Añade que su voto a favor o en contra del techo de gasto tendrá que ver con los réditos que pueda obtener su partido en Cataluña. Aunque el partido de Puigdemont tampoco se ha mostrado especialmente entusiasta ante la reforma fiscal propuesta en el pacto entre ERC y el PSC para la investidura de Salvador Illa, que debería concretarse en una nueva financiación autonómica. 

Reunión en Suiza

Para intentar convencer al líder de Junts, una delegación del PSOE se ha desplazado este viernes a Suiza, con el fin de rehacer puentes con esta formación, según ha avanzado eldiario.es y han confirmado a EFE fuentes conocedoras del encuentro.

La reunión llega después de la última derrota parlamentaria del Gobierno de Pedro Sánchez esta semana, cuando Junts tumbó, junto a PP y Vox, una propuesta para regular los contratos de alquiler de temporada y de habitaciones.

El emisario del PSOE es de nuevo el secretario de Organización, Santos Cerdán, que ya ha asistido a otras reuniones de este tipo. 

Por el momento no ha trascendido ningún detalle sobre el encuentro, aunque el ministro para la Transición Digital y la Función Pública, Óscar López, ha afirmado este sábado en San Sebastián que será su partido el que informe sobre ello.

El PSOE siempre ha confirmado y ha «explicado con transparencia y normalidad» las reuniones que ha tenido, por lo que será el partido «el que confirme o no las reuniones que se produzcan y dé cuenta de ellas», ha defendido López durante su presencia en el Festival de Cine de San Sebastián.

Entre varios fuegos

El PSOE, por tanto, se encuentra entre distintos fuegos. Porque mientras Puigdemont les aprieta por una parte, en ERC lo hacen por la otra. La secretaria general de los republicanos, Marta Roviraha exigido este sábado al PSOE «avances rotundos» en el cumplimiento del acuerdo entre ambos sobre financiación y también amenaza con romper si estos no se producen.

«Nos será prácticamente imposible entrar en cualquier diálogo o negociación de presupuestos para este 2025 si no vemos avances rotundos, si no vemos cumplimiento eficaz, si no vemos que con muchas ganas se cumple el acuerdo que nosotros aprobamos colectivamente», ha declarado al inicio del Consell Nacional de ERC en la sede del partido.

Rovira ha añadido que si el PSC no cumple los acuerdos contemplados en el pacto de investidura «llegaremos al final del camino«. 

Mientras, el PP critica esa misma reforma autonómica, al tiempo que se negocia bilateralmente en Suiza.  

La vicesecretaria de Sanidad y Educación de los populares, Ester Muñoz, ha afirmado este sábado que es «increíble» y no se «entiende» que «no se pueda hablar sobre financiación en la Conferencia de presidentes y sin embargo los Presupuestos Generales de España sí se puedan negociar en Suiza con Puigdemont».

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya ha iniciado una ronda de contactos con presidentes autonómicos. El presidente andaluz, Juanma Moreno, y el gallego, Alfonso Rueda -los primeros en asistir a La Moncloa junto al lehendakari Imanol Pradales– ya le transmitieron a Sánchez que retire el ‘concierto catalán’.



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