El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Mike Johnson
La Cámara de Representantes de Estados Unidos ha dado luz verde, de manera unánime, a una nueva legislación que busca reforzar la seguridad de los candidatos a la Presidencia y Vicepresidencia. La medida llega tras los recientes intentos de asesinato contra Donald Trump, quien busca regresar a la Casa Blanca en las próximas elecciones de noviembre.
La propuesta, que ha sido impulsada por el republicano Mike Lawler y el demócrata Ritchie Torres, ambos representantes de Nueva York, ha concluido con un resultado de 405 votos a favor y ninguno en contra. Ahora, el texto deberá ser evaluado y aprobado por el Senado de Estados Unidos para su implementación definitiva.
El proyecto de ley insta al Servicio Secreto a evaluar y determinar el número adecuado de agentes necesarios para proteger no solo a los actuales presidentes y vicepresidentes, sino también a aquellos que aspiran a ocupar dichos cargos. Este movimiento legislativo se produce poco después de que Donald Trump enfrentara un peligroso incidente en West Palm Beach, Florida.
La seguridad en los ataques a Trump
El expresidente Donald Trump fue víctima de un intento de asesinato mientras jugaba al golf en Florida el pasado domingo. El sospechoso, identificado como Ryan Wesley Routh, de 58 años, ha sido acusado de dos cargos federales por el uso ilegal de armas de fuego, delitos que podrían resultar en hasta 20 años de prisión.
Este no ha sido el único incidente que ha puesto en peligro la vida de Trump. El 13 de julio, durante un mitin de campaña en Butler, Pensilvania, otro ataque fue frustrado gracias a la rápida intervención de un francotirador del Servicio Secreto. El atacante, un joven de 20 años llamado Thomas Matthew Crooks, fue neutralizado segundos después de intentar llevar a cabo su plan.
