La poeta y escritora Corina Oproae, nacida en la región rumana de Transilvania en 1973, ha ganado el XX Premio Tusquets con ‘La casa limón’, una novela que narra la decadencia y descomposición del régimen de Ceausescu desde los ojos de una niña. El jurado, presidido por Antonio Orejudo y formado por Bárbara Blasco, Eva Cosculluela, Silvia Hidalgo y el editor de Tusquets, Juan Cerezo, ha elegido la obra de Oproae por “su escritura precisa y evocadora, cruda y onírica, y por el testimonio de vivencias históricas de la Europa del Este”. El galardón tiene una dotación de 18.000 euros y llegará a las librerías el próximo 9 de octubre.
“Quería mirar el comunismo como si lo vieras por primera vez, con esa asombrosa naturalidad con la que se viven las cosas cuando eres niño; cosas como la falta de libertad, las delaciones de los compañeros o las colas para conseguir comida”, ha explicado la autora, que tenía 17 años cuando Ceaucescu fue derrocado y ajusticiado en 1989 por una revuelta popular tras más de dos décadas de salvaje represión.
El impulso para escribir ‘La casa de limón’, que narra la vida cotidiana de una familia de clase media azotada por la enfermedad y las desapariciones, surgió precisamente en un viaje con los hijos de la autora por Rumanía. “Mis hijos me hicieron preguntas difíciles de responder”, ha confesado Oproae, que se estableció en Catalunya en 1988, adquirió la nacionalidad española en 2002 y ha escrito ‘La casa limón’ en castellano. “Todas las dictaduras, sean de derechas o de izquierdas, se parecen. Rumanía y España lo saben, por desgracia. Las personas que hemos vivido eso sabemos lo que son las cartillas de racionamiento”.
‘La casa de limón’ y Oproae se suman a una nueva estela de autoras como la albanesa Lea Ypi, la moldava Tatiana Tibuleac o la bielorrusa Natalia Litvinova, reciente ganadora del Premio Lumen de Novela 2024 por ‘Luciérnaga’, que abordan el derrumbe del bloque soviético desde una nueva perspectiva, la de la infancia. “Creo que hasta ahora esos hechos se habían narrado desde la disidencia. Cuando cuentas algo en caliente tiendes a hacerlo desde la denuncia. Pero hacerlo tantos años después hace que te de tiempo a hacer las paces y a poner las cosas en su sitio”, reflexiona Oproae, quien ha asegurado que la suya no es una visión nostálgica ni blanqueada de los años de su infancia: “la crudeza y el horror están ahí”, afirma.
‘La casa de limón’ recrea la Transilvania rural y ancestral de los años 80 y establece un juego con el lector al colocar a una niña como narradora. “Hay cosas terribles como las enfermedades, la locura del padre y las desapariciones de los que no piensan como el régimen que ella no entiende y nosotros sí”, ha adelantado su editor, Juan Cerezo. Oproae ha citado los cuentos ‘En tierras bajas’ de la Premio Nobel de Literatura Herta Müller como una de sus grandes influencias, además de explicar que se «enamoró» de la literatura española gracias al ‘Quijote’ y los poetas de la Generación del 27 y del catalán leyendo a Mercè Rodoreda. Oproae estudió Filología Inglesa e Hispánica en Rumanía. Ha publicado los libros de poemas ‘Mil y una muertes’, ‘Intermitencias’ y ‘Desde dónde amar’, y en catalán ha escrito ‘La mà que tremola’, un libro de reflexión poética sobre el hecho de escribir en una lengua que no es la materna. También ha traducido al catalán y castellano autores como Marin Sorescu, Ana Blandiana y Tatiana Tibuleac y es autora y traductora de ‘La poesía del siglo XX’ en Rumanía.
