Tras el asesinato del principal comandante militar de Hezbolá, Fuad Shukr, llevado a cabo por Israel este verano, surgieron informes que revelan que a varios altos oficiales militares israelíes se les pidió mantener un perfil bajo para evitar posibles represalias.

El miércoles, un informe de la emisora pública Kan informó que a los oficiales superiores de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), especialmente aquellos destinados en el frente norte, se les indicó “reducir su exposición en las comunicaciones”, lo que incluyó restringir el uso de teléfonos móviles y modificar sus rutinas habituales para prevenir intentos de asesinato.

Este reporte se da en un contexto de tensiones crecientes entre Israel y Hezbolá, tras dos días consecutivos de ataques explosivos en Líbano, atribuidos mayoritariamente a Israel. Además, coincide con el anuncio del Shin Bet, que el día anterior comunicó que había frustrado un intento de Hezbolá de asesinar a un ex alto funcionario de seguridad israelí utilizando un explosivo controlado a distancia.

El Shin Bet también afirmó el martes que la misma célula de Hezbolá estaba detrás de una explosión en Tel Aviv en septiembre de 2023, cuyo objetivo era el exministro de Defensa, Moshe Ya’alon. Afortunadamente, no se registraron heridos en ese atentado.

El informe de Kan también destacó que varios altos funcionarios de seguridad israelíes se reunieron para establecer nuevas directrices destinadas a proteger a los altos mandos de las FDI sin comprometer sus responsabilidades operativas.

En julio, un ataque aéreo de Israel mató a Fuad Shukr, el comandante militar más importante de Hezbolá, en represalia por un ataque con cohetes en Majdal Shams que acabó con la vida de 12 niños. Posteriormente, el líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, advirtió a Israel que debería prepararse para “ira y venganza”, prometiendo que el pueblo israelí “lloraría profundamente” en los días venideros.

A finales de agosto, en una acción preventiva, la Fuerza Aérea israelí bombardeó múltiples objetivos de Hezbolá. Según las FDI, la operación buscaba neutralizar armamento que estaba listo para ser utilizado en un ataque masivo en el centro y norte de Israel. Pese a ello, Hezbolá logró lanzar varios cientos de cohetes contra el norte de Israel en represalia por la muerte de Shukr.

En marzo de 2023, Hezbolá llevó a cabo un ataque con bomba en el cruce de Megiddo, en Israel, que dejó gravemente herido a un civil. El oficial de Hezbolá responsable de dicho atentado fue abatido por las FDI en febrero, en un ataque dirigido contra la Fuerza Radwan.

A lo largo de más de 11 meses de intensos enfrentamientos en la frontera entre Israel y Líbano, se contabilizan 26 civiles y 20 soldados israelíes muertos, mientras que en el Líbano han perecido más de 450 miembros de Hezbolá y 140 civiles. Además, los combates han forzado a decenas de miles de personas a abandonar sus hogares en ambos lados de la frontera.

Fuente