Denis Shapovalov soltó un grito de alegría tras asegurar el pase de Canadá, campeón de 2022, a la final de la Copa Davis de este año. El tenista derrotó al británico Dan Evans por 6-0, 7-5, logrando así una redención personal tras su último enfrentamiento con los mismos rivales.
En 2017, un golpe impulsivo de Shapovalov, lanzado en frustración, impactó accidentalmente al árbitro, lo que le costó la descalificación y la derrota de Canadá ante Gran Bretaña por 3-2. Ahora, con 25 años, el canadiense no comete el mismo error, asegurando una victoria clave en el primer partido y garantizando que Canadá, no Gran Bretaña, acompañe a Argentina como los dos países que avanzan desde el grupo en Manchester, Inglaterra.
Shapovalov, quien nació en Israel y llegó a estar entre los diez mejores del mundo, aunque actualmente ocupa el puesto 100 del ranking, confesó que tras ganar con facilidad el primer set, le costó mantener el ritmo. “Estoy muy contento por la victoria, es un rival complicado y pelea muy bien”, comentó el canadiense, logrando calmar a los 15.700 espectadores que lo esperaban.
“Dan se mostró muy fuerte en el segundo set. Nunca había jugado un primer set tan limpio en mi vida, así que estoy muy feliz por esta victoria. Sentí el entusiasmo de Dan y de la multitud, así que el partido definitivamente empezaba a cambiar de rumbo, pero me alegra haberlo ganado en sets consecutivos”, añadió Shapovalov.
La eliminatoria se resolvió cuando Felix Auger-Aliassime obtuvo un triunfo por 7-6 (10/8), 7-5 sobre Jack Draper, asegurando el pase de Canadá. A pesar de que los británicos se llevaron la victoria en el partido de dobles, con un marcador final de 2-1, no fue suficiente para alcanzar la final.
