Una patrulla marítima en la frontera del Tarajal, a 15 de septiembre de 2024, en Ceuta (España).
Este domingo, un suceso conmocionó a la localidad marroquí de Castillejos, situada a escasos 7 kilómetros de Ceuta. El cuerpo sin vida de un joven magrebí fue descubierto en una de sus playas, desatando una rápida respuesta de las autoridades locales. Un dispositivo policial especial se desplegó en el área para gestionar la situación y contener a centenares de personas de origen subsahariano y magrebí que, en un intento desesperado por alcanzar Ceuta, se agolparon cerca del lugar del hallazgo.
El cadáver fue trasladado al hospital Saniat Al Ramel en Tetuán, donde se le realizará una autopsia para determinar las circunstancias exactas de la muerte. Según las informaciones proporcionadas por el medio local Press Tetuan, el cuerpo no mostraba signos de descomposición avanzada, lo que podría indicar un ahogamiento reciente. Este triste evento subraya la continua y peligrosa presión migratoria en esta zona del norte de África.
El incidente ocurre en un contexto de creciente tensión en las fronteras cercanas. Las autoridades marroquíes han estado particularmente activas desde este sábado, trabajando en las fronteras del Tarajal al sur y de Beliones al norte. A pesar de numerosas detenciones, no se ha logrado disuadir a las centenas de personas que, desde las montañas marroquíes, esperan su oportunidad para saltar la valla.
La frontera del Tarajal ha experimentado cierres intermitentes durante el día, aunque la situación ha sido más tranquila en la parte española. La Guardia Civil y la Policía Nacional permanecen desplegados, vigilantes ante cualquier intento de cruce. Además, el Ejército está en alerta, listo para intervenir si las circunstancias lo requieren, según han informado fuentes cercanas a la institución.
Este incidente no es un caso aislado. La recuperación de cuerpos sin vida de jóvenes en las playas de Castillejos se ha convertido en un evento lamentablemente habitual, similar a lo que ocurre en Ceuta, donde entre agosto y la primera quincena de septiembre se han encontrado siete personas fallecidas. Estos sucesos resaltan los continuos y graves desafíos que enfrentan las autoridades y las comunidades en esta frontera entre dos mundos.