No pudo ser. Valencia Basket cayó ante el Mónaco de Euroliga a pesar de mostrar una cara competitiva, especialmente a nivel ofensivo. Los de Pedro Martínez, que venían de dar su mejor imagen de la pretemporada, tuvieron a los monegsacos contra las cuerdas prácticamente toda la contienda, pero se cayeron en el momento decisivo del encuentro, en los últimos cinco minutos del encuentro, perdiendo así la final del torneo amistoso Encesta Rías de Galicia. El equipo evidenció que necesita continuar ganando rodaje para mostrar su mejor versión competitiva, pero que sigue teniendo en Semi Ojeleye un jugador que marca diferencias y que otros como Brancou Badio o Jean Montero le pueden dar mucho ritmo al juego valenciano.
El primer cuarto tuvo un elevado tono competitivo ‘taronja’, que a pesar de entrar en bonus apenas dos minutos después de empezar el partido no rebajó la intensidad defensiva e imprimió más ritmo a todo un Mónaco de Euroliga. Los de Pedro Martínez, con jugadores como Jean Montero mostrando una versión muy fresca y con sensaciones de competición, se mostraban superiores a los monegascos moviendo la pelota muy rápido y mostrando un importante acierto en sus lanzamientos a canasta, cerrando en una distancia de ocho puntos ese primer acto (26-18), tomándole el pulso por la vía rápida al choque con una ilusionante versión de Brancou Badio.
Los equipos salieron también vivos al segundo cuarto, con el cuadro taronja practicando una gran defensa que retrasó casi dos minutos la primera canasta del Mónaco, aunque teniendo también algo menos de acierto ofensivo con algunas imprecisiones en la zona final de la pista. La fortaleza defensiva, no obstante, se empezó a diluir con el paso de los minutos, permitiendo a los monegascos igualar el marcador gracias al gran nivel mostrado por Alpha Diallo y situar el encuentro en distancias mucho más cortas. El hecho de entrar en bonus nuevamente por la vía rápida (antes de cumplirse el ecuador), tampoco ayudó en exceso y el tramo final de la primera parte se convirtió en un intercambio de golpes en el que Valencia Basket no le perdió la cara al encuentro y se fue al descanso por delante gracias a un muy buen triple de Montero, que junto con Badio y Ojeleye marcaban la pauta en clave valenciana.
La segunda parte empezó con una dinámica similar, pero con los de Pedro Martínez más entonados y con el propio Ojeleye activando el ‘modo bestia’ tanto en el lanzamiento como en la penetración. El equipo taronja mostraba un gran nivel en el tercer cuarto, viendo incrementado su acierto en el tiro exterior y moviéndose en rentas más altas que en el segundo y cerrándolo cinco por encima.
El cuarto y definitivo mantuvo el mismo guion hasta el final, con una igualdad tremenda y pequeños momentos de superioridad para cada equipo, aunque con el Mónaco consiguiendo recortar la distancia y dejar el encuentro empatado a tres del final. En el momento de la verdad, no obstante, se le secó la inspiración a Valencia Basket y el conjunto monegasco mostró mucho más aplomo para materializar sus ataques y terminó llevándose la victoria.