En una inusual declaración, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) admitieron haber realizado hoy dos ataques con drones en el sur de Siria, dirigidos contra un operativo de Hezbolá y otro terrorista vinculado a Irán.

El ejército informó que el primer ataque, llevado a cabo en la región de Quneitra, se saldó con la muerte de Ahmed al-Jaber, miembro de la unidad Golan File de Hezbolá. Esta unidad ha sido acusada de planear acciones contra Israel.

El segundo ataque, efectuado en la zona de al-Rafid, estuvo dirigido contra un terrorista que, según las FDI, “participó en actos terroristas contra el Estado de Israel y actuaba en cooperación y bajo la dirección de Irán”.

Paralelamente, el ejército israelí informó que varios drones cargados de explosivos fueron lanzados desde el Líbano hacia el norte de Israel, impactando cerca del área de Keren Naftali. Además, unos 15 cohetes fueron disparados desde el Líbano hacia la Galilea Occidental.

A pesar de los ataques, no se reportaron heridos.



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