Antoine Griezmann siempre ha sido un fijo para Simeone, pero el rol del francés en este arranque de competición es diferente al de la pasada temporada. El técnico argentino está usando a su jugador fetiche de una manera totalmente distinta a la esperada.
Durante la anterior campaña, el ex del FC Barcelona no descansaba.Su importancia en el equipo era tal, que Simeone le hacía disputar todos los partidos, ya fueran del campeonato liguero o de Champions League. Únicamente en Copa del Rey el francés arrancaba el partido desde el banquillo. Pese al buen nivel mostrado, esta circunstancia provocó que, a mediados de competición, el francés notara un bajón importante en su rendimiento.
La carga física no era únicamente una sensación, ya que sus números lo demostraban. La confianza de Simeone en él era tal que, a mediados de temporada, se convirtió en el jugador que más minutos había disputado de todo Europa. Esta carga física que acumulaba el francés le hizo no ser el mismo que en el primer tramo de la temporada y bajó sus registros goleadores de manera considerable. De esta manera, el Griezmann del tramo final de temporada no fue el mismo que aquel que era determinante en todos los partidos.
NO HA COMPLETADO LOS 90 MINUTOS
Nada que ver con su situación actual. En este arranque liguero, Griezmann no es un jugador tan indiscutible como en la pasada temporada. En los cuatro partidos disputados hasta el momento, el francés no ha completado los 90 minutos en ninguno de ellos, una situación que parecería anómala en la anterior campaña. El Cholo ha decidido sustituir a su estrella hasta en tres ocasiones. En el tercer partido, el francés no saltó ni desde el once inicial, entrando en la segunda mitad para sustituir a Julián Álvarez. Una circunstancia que podría parecer lógica, pero en la anterior temporada no sucedió hasta la jornada 20 de competición.
Donde sí que está perdiendo un protagonismo considerable es con su selección. En el último duelo de Francia ante Bélgica correspondiente a la Nations League, Griezmann vio gran parte del partido en el banquillo y únicamente disputó 12 minutos de encuentro.
El objetivo de Simeone es dosificar a su máxima estrella lo máximo posible. La temporada es muy exigente y los rojiblancos buscarán competir en las tres competiciones. Con las nuevas incorporaciones, el fondo de armario del equipo es mayor y el técnico tiene en sus filas a distintos jugadores que pueden ‘hacer’ de Griezmann. De todas las maneras, el francés sigue siendo indispensable y Simeone espera su mejor versión para los momentos más decisivos de la temporada.