Pedro Sánchez ha recibido esta mañana al candidato venezolano Edmundo González y, tras la reunión, este le ha reconocido su labor en favor de la democracia en Venezuela. Alrededor de las 10:00, pocas horas después de aterrizar tras su viaje a China, el presidente del Gobierno ha paseado por la Moncloa y luego se ha reunido con el que, según las actas publicadas por la oposición, ha sido el ganador de las elecciones del pasado 28 de julio en Venezuela. Su asilo político en España ha desatado una tormenta política interna con la oposición de PP, Vox y PNV en el Congreso y amenaza de Caracas de romper relaciones si se le reconoce como presidente electo.
La oposición venezolana y los exiliados en España están a la espera de que González decida qué va a hacer ahora. La situación es complicada, porque no puede formar un Gobierno en el exilio en España. Tras la reunión, González ha emitido un breve comunicado en el que asegura que continuará. «Le ratifiqué [a Pedro Sánchez] mi determinación de continuar la lucha por hacer valer la voluntad soberana del pueblo venezolano expresada el 28 de julio por más de 8 millones de electores», se lee en el texto.
También agradece al presidente «su disposición de recibirnos a mí y a mi esposa en España» y le expresa su «reconocimiento por su interés de trabajar por la recuperación de la democracia y el respeto a los derechos humanos en nuestro país.
Petición del Congreso
La reunión se produce tan solo un día después de que el Congreso de los Diputados, a instancias del PP, haya reclamado al Ejecutivo que se le reconozca como presidente electo de Venezuela. La cita no forma parte de la agenda institucional del jefe del Ejecutivo, informa Iván Gil. Sánchez le ha trasmitido «una cálida bienvenida a nuestro país» y ha defendido su acogida a través de la red social X «mostrando el compromiso humanitario y la solidaridad de España con los venezolanos«. Por otra parte, ha hecho equilibrios para asegurar que «España sigue trabajando en favor de la democracia, el diálogo y los derechos fundamentales del pueblo hermano de Venezuela».
La portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ha subrayado tras la amenaza de Venezuela de romper relaciones diplomáticas que “la embajada en Caracas está trabajando con absoluta normalidad”. Los socialistas votaron este miércoles en contra de la iniciativa del PP para instar al Ejecutivo a reconocer a Edmundo González como presidente electo. Una medida aprobada por el Congreso que ha tensado las relaciones diplomáticas.
En este contexto, Alegría ha mostrado el interés del Gobierno de “trabajar para mantener las mejores relaciones con el pueblo venezolano”, según ha declarado esta mañana a los medios antes de acudir a un desayuno informativo. Una actitud que ha opuesto a la de la oposición, a quien acusó de “servirse del pueblo venezolano para atacar al gobierno de España”. El portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha ido un paso más allá para advertir que los populares “creyendo que atacaban al Gobierno lo que ha hecho es atacar a todas las empresas que tienen sedes y relaciones comerciales en Venezuela”. Una política de “tierra quemada”, reprochó, para vaticinar que tendría “consecuencias”.